Tenía en mis manos la copa del faraón, y, tomando los racimos, los exprimí en la copa del faraón y la puse en sus manos.”
Génesis 40:1 - Biblia Nacar-Colunga Sucedió después que, habiendo faltado contra su señor, el rey de Egipto, el copero y el repostero del rey, Dugang nga mga bersyonBiblia Reina Valera 1960 Aconteció después de estas cosas, que el copero del rey de Egipto y el panadero delinquieron contra su señor el rey de Egipto. Biblia Nueva Traducción Viviente Pasado un tiempo, el jefe de los coperos y el jefe de los panaderos del faraón ofendieron a su señor, el rey. Biblia Católica (Latinoamericana) Sucedió tiempo después, que dos funcionarios, el que preparaba las bebidas para el rey de Egipto, y el panadero principal, cometieron algunas faltas contra su señor el rey de Egipto. La Biblia Textual 3a Edicion Después de estas cosas, sucedió que el copero del rey de Egipto y su panadero pecaron contra su señor, el rey de Egipto. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Después de esto sucedió que el copero y el panadero del rey de Egipto ofendieron a su señor, al rey de Egipto. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y aconteció después de estas cosas, que el copero del rey de Egipto y el panadero delinquieron contra su señor el rey de Egipto. |
Tenía en mis manos la copa del faraón, y, tomando los racimos, los exprimí en la copa del faraón y la puse en sus manos.”
Dentro de tres días, el faraón exaltará tu cabeza, y te restablecerá en tu cargo, y pondrás la copa del faraón en sus manos, como antes lo hacías, cuando eras copero.
Viendo el jefe de los reposteros cuan favorablemente había interpretado el sueño, dijo a José: “Pues he aquí el mío: Llevaba yo sobre mi cabeza tres canastillas de pan blanco.
se encolerizó el faraón contra sus dos ministros, el jefe de los coperos y el jefe de los reposteros,
El jefe de los coperos y el jefe de los reposteros del rey de Egipto, que estaban presos en la cárcel, tuvieron ambos un sueño la misma noche, cada uno el suyo; y cada sueño de diversa significación.'
Entonces habló al faraón el jefe de los coperos, diciendo: “Ahora me acuerdo de mi falta.
¡Oh Señor! que esté atento tu oído a la plegaria de tu siervo y a la de los siervos tuyos que desean temer tu nombre. Concede ahora próspero suceso a tu siervo y haz que halle yo gracia a los ojos de este hombre”; pues servía yo entonces de copero al rey.'
Aquella noche, no pudiendo el rey conciliar bien el sueño, hizo que le llevaran el libro de los anales, las crónicas; y leyéndolas ante el rey,'