Era Abraham ya viejo, muy entrado en años, y Yahvé le había bendecido en todo.
Génesis 26:12 - Biblia Nacar-Colunga Sembró Isaac en aquella tierra, y recogió aquel año ciento por uno, pues le bendijo Yahvé. Dugang nga mga bersyonBiblia Reina Valera 1960 Y sembró Isaac en aquella tierra, y cosechó aquel año ciento por uno; y le bendijo Jehová. Biblia Nueva Traducción Viviente Cuando Isaac sembró sus cultivos ese año, cosechó cien veces más grano del que había plantado, porque el Señor lo bendijo. Biblia Católica (Latinoamericana) Isaac sembró en aquella tierra y cosechó aquel año el ciento por uno. Yavé lo bendijo La Biblia Textual 3a Edicion Sembró Isaac en aquella tierra, y aquel mismo año cosechó ciento por uno, porque YHVH lo bendijo. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Sembró Isaac en aquel país y cosechó aquel año ciento por uno. Yahveh lo bendijo Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y sembró Isaac en aquella tierra, y cosechó aquel año ciento por uno; y le bendijo Jehová. |
Era Abraham ya viejo, muy entrado en años, y Yahvé le había bendecido en todo.
Yahvé ha bendecido largamente a mi señor y le ha engrandecido, dándole ovejas y bueyes, plata y oro, siervos y siervas, camellos y asnos.
Después de la muerte de Abraham, Dios bendijo a Isaac, su hijo, y habitó junto al pozo de Jai-Roi.
de no hacernos tú mal, como no te hemos tocado nosotros a ti, haciéndote sólo bien y dejándote partir en paz Tú eres ahora el bendito de Yahvé.”
Sigue habitando en esta tierra, donde yo te diga; peregrina por ella, que yo estaré contigo y te bendeciré, pues a ti y a tu descendencia daré todas estas tierras, cumpliendo el juramento que hice a Abraham, tu padre,'
Bien poco era lo que antes tenías, pero se ha aumentado grandemente, y Yahvé te ha bendecido a mi paso. Ahora, pues, habré de hacer también yo por mi casa.”
Yahvé bendijo las postrimerías de Job más que sus principios, y llegó a poseer Job catorce mil ovejas, seis mil camellos, mil yuntas de bueyes y mil asnas.
Habrá abundancia de trigo en el país; en las cimas de los montes ondularán las mieses como (árboles del) Líbano y florecerán en las ciudades como la hierba de la tierra”
La bendición de Dios es lo que enriquece; nuestro afán no le añade nada.'
Siembra bien de mañana tu simiente, y a la tarde no dejes reposar tu mano; que no sabes qué es mejor, si esto o aquello, o si ambas cosas son igualmente buenas.'
porque yo sembraré la paz. La vid dará su fruto, y dará la tierra su rendimiento, y los cielos su rocío, y pondré al resto de este pueblo en posesión de todo esto.
Lo sembrado en buena tierra es el que oye la palabra y la entiende, y da fruto, uno ciento, otro sesenta, otro treinta.
Otra cayó sobre tierra buena y dio fruto, una ciento, otra sesenta, otra treinta.
Otra cayó en tierra buena y dio fruto, que subía y crecía, dando uno treinta, otro sesenta y otro ciento.