“No, señor mío, óyeme; yo te doy el campo y la caverna que se halla a su extremo; te la doy ante los hijos de mi pueblo; sepulta a tu muerta.”
2 Samuel 24:24 - Biblia Nacar-Colunga Pero el rey respondió a Areuna: “No; quiero comprártelo por precio de plata; no voy a ofrecer yo a Yahvé, mi Dios, holocaustos que no me cuestan nada.” Y compró David la era y los bueyes en cincuenta siclos de plata;' Dugang nga mga bersyonBiblia Reina Valera 1960 Y el rey dijo a Arauna: No, sino por precio te lo compraré; porque no ofreceré a Jehová mi Dios holocaustos que no me cuesten nada. Entonces David compró la era y los bueyes por cincuenta siclos de plata. Biblia Nueva Traducción Viviente Pero el rey le respondió a Arauna: —No, insisto en comprarlo; no le presentaré ofrendas quemadas al Señor mi Dios que no me hayan costado nada. De modo que David le pagó cincuenta piezas de plata por el campo de trillar y por los bueyes. Biblia Católica (Latinoamericana) No, quiero pagarte su justo precio, no quiero ofrecer a Yavé mi Dios holocaustos que nada me cuestan. David compró entonces la era y los bueyes por cincuenta siclos de plata. La Biblia Textual 3a Edicion Pero el rey dijo a Arauna: No, sino que ciertamente por precio te lo compraré, pues no elevaré holocaustos a YHVH mi Dios que no me cuesten nada. Así David compró la era y los bueyes por cincuenta siclos de plata. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Respondió el rey a Arauná: 'No; te lo compraré por su precio, pues no quiero yo ofrecer a Yahveh, mi Dios, holocaustos que no me cuesten nada'. Y David compró la era y los bueyes por cincuenta siclos de plata. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y el rey dijo a Arauna: No, sino por precio te lo compraré; porque no ofreceré a Jehová mi Dios holocaustos que no me cuesten nada. Entonces David compró la era y los bueyes por cincuenta siclos de plata. |
“No, señor mío, óyeme; yo te doy el campo y la caverna que se halla a su extremo; te la doy ante los hijos de mi pueblo; sepulta a tu muerta.”
y habló así a Efrón, oyéndolo todos: “Óyeme, te ruego; yo te daré el precio del campo. Recíbelo tú, y sepultaré en él a mi muerta.”
Oyó Abraham a Efrón y pesóle ante los hijos de Jet la plata que éste había dicho, cuatrocientos siclos de plata corriente en el mercado.
Alzóse Satán contra Israel e incitó a David a hacer el censo de Israel.
Y dijo David: “Esta será la casa de Yahvé Dios y aquí estará el altar de los holocaustos para Israel.”
No volváis mal por mal, procurad lo bueno a los ojos de todos los hombres.