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2 Samuel 22:40 - Biblia Nacar-Colunga

Me ceñiste de fortaleza para la guerra, sometiste a los que se alzaban contra mí,

Tan-awa ang kapitulo
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Dugang nga mga bersyon

Biblia Reina Valera 1960

Pues me ceñiste de fuerzas para la pelea; Has humillado a mis enemigos debajo de mí,

Tan-awa ang kapitulo

Biblia Nueva Traducción Viviente

Me has armado de fuerza para la batalla; has sometido a mis enemigos debajo de mis pies.

Tan-awa ang kapitulo

Biblia Católica (Latinoamericana)

Me llenas de fuerza para el combate, doblegas mis enemigos bajo mis pies.

Tan-awa ang kapitulo

La Biblia Textual 3a Edicion

Pues Tú me ceñiste de fuerza para la batalla, E hiciste que mis enemigos se doblegaran debajo de mí,

Tan-awa ang kapitulo

Biblia Serafín de Ausejo 1975

Tú me ciñes de fuerza en el combate, doblegas bajo mi mano al adversario;

Tan-awa ang kapitulo

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

Pues tú me ceñiste de fuerzas para la batalla, y subyugaste debajo de mí a los que contra mí se levantaron.

Tan-awa ang kapitulo
Ubang mga hubad



2 Samuel 22:40
11 Cross References  

Sea para él como vestido que le envuelva y como cinto que siempre le ciña.


Es mi fuerza y mi ciudadela, mi fortaleza y mi libertador, mi escudo; en El confío. El me somete los pueblos.'


Porque ¿qué Dios hay fuera de Yahvé? ¿Qué roca fuera de nuestro Dios?


Los machacaba sin que pudieran resurgir; caían bajo mis pies.'


Tú, ¡oh Dios! eres mi Rey, tú das victorias a Jacob.


Soy yo, Yahvé, no es ningún otro; fuera de mí no hay Dios. Yo te he ceñido, aunque no me conocías,'


A ti vendrán humillados los hijos de tus tiranos, y se postrarán a tus pies cuantos te infamaron. Y te llamarán la ciudad de Yahvé, la Sión del Santo de Israel.


corroborados en toda virtud por el poder de su gloria, para el ejercicio alegre de la paciencia y de la longanimidad en todas las cosas,


Cantaron un cántico nuevo, que decía: Digno eres de tomar el libro y abrir sus sellos, porque fuiste degollado y con tu sangre has comprado para Dios hombres de toda tribu, lengua, pueblo y nación,


Fue, pues, David a Queila con su gente y atacó a los filisteos, los puso en fuga, apoderándose de su ganado y haciéndoles experimentar una gran derrota, librando así a los habitantes de Queila.