Qpf. Yahvé está próximo a los contritos de corazón y salva a los de espíritu abatido.
2 Corintios 1:10 - Biblia Nacar-Colunga que nos sacó de tan mortal peligro y nos sacará. En El tenemos puesta la esperanza de que seguirá sacándonos, Dugang nga mga bersyonBiblia Reina Valera 1960 el cual nos libró, y nos libra, y en quien esperamos que aún nos librará, de tan gran muerte; Biblia Nueva Traducción Viviente Efectivamente él nos rescató del peligro mortal y volverá a hacerlo de nuevo. Hemos depositado nuestra confianza en Dios, y él seguirá rescatándonos, Biblia Católica (Latinoamericana) El nos libró de ese peligro de muerte tan grande, y nos seguirá protegiendo. En él hemos puesto nuestra esperanza y seguirá amparándonos, La Biblia Textual 3a Edicion el cual nos libró de tan gran muerte, y nos librará;° en quien hemos esperado, y aún nos librará; Biblia Serafín de Ausejo 1975 Él nos libró de una muerte tan segura y nos librará. En Él hemos puesto la esperanza de que nos seguirá librando. Biblia Reina Valera Gómez (2023) el cual nos libró, y nos libra; y en quien confiamos que aún nos librará de tan grande muerte; |
Qpf. Yahvé está próximo a los contritos de corazón y salva a los de espíritu abatido.
Oídme, casa de Jacob, y todo el resto de la casa de Israel, que habéis sido cargados (sobre mí) desde el vientre, llevados desde el seno.
pues nuestro Dios, al que servimos, puede librarnos del horno encendido y nos librará de tu mano.
(17) Mandó entonces el rey que trajeran a Daniel y le arrojaran al foso de los leones. Y, hablando el rey a Daniel, le dijo: Quiera salvarte tu Dios, a quien perseverante sirves.
Sólo por esto los judíos, al cogerme en el templo, intentaron quitarme la vida;'
para que me libre de los incrédulos en Judea y que el servicio que me lleva a Jerusalén sea grato a los santos.
Aún más, temimos como cierta la sentencia de muerte, para que no confiásemos en nosotros mismos, sino en Dios, que resucita a los muertos,
cual desconocidos, siendo bien conocidos; cual moribundos, bien que vivamos; cual castigados, mas no muertos;'
Pues por esto penamos y combatimos, porque esperamos en Dios vivo, que es el Salvador de todos los hombres, sobre todo de los fieles.
El Señor me asistió y me dio fuerzas, para que por mí fuese cumplida la predicación y todas las naciones la oigan. Así fui librado de la boca del león.
Pues sabe el Señor librar de la tentación a los piadosos y reservar a los malvados para castigarlos en el día del juicio,
Y añadió: “Yahvé, que me libró del león y del oso, me librará también de la mano de ese filisteo.” Saúl entonces le dijo: “Ve y que Yahvé sea contigo.”
Samuel cogió una piedra y la puso entre Masía y Jesana; la llamó Eben-Ezer, diciendo: “Hasta aquí nos socorrió Yahvé.”