¿Cómo, pues, menospreciando a Yahvé, has hecho lo que es malo a sus ojos? Has herido a espada a Urías, jeteo; tomaste por mujer a su mujer, y a él le mataste con la espada de los hijos de Amón.'
1 Samuel 24:5 - Biblia Nacar-Colunga y los hombres de David decían a éste: “Ahí tienes el día que Yahvé te anunció, diciéndote que entregaría a tu enemigo en tus manos; trátale como bien te parezca.” David se levantó y, acercándose calladamente, cortó la orla del manto de Saúl.' Dugang nga mga bersyonBiblia Reina Valera 1960 Después de esto se turbó el corazón de David, porque había cortado la orilla del manto de Saúl. Biblia Nueva Traducción Viviente Pero comenzó a remorderle la conciencia por haber cortado el manto de Saúl, Biblia Católica (Latinoamericana) Los compañeros de David le dijeron: 'Ahora Yavé te entrega en tus manos a tu enemigo. Puedes hacerle ahora todo lo que quieras'. La Biblia Textual 3a Edicion Y después de esto, aconteció que el corazón de David le remordió por haber cortado la orilla del manto de Saúl. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Entonces los hombres de David dijeron: 'Éste es el día que Yahveh te anunció cuando te dijo: 'Yo entregaré a tu enemigo en tus manos, para que hagas de él lo que te plazca''. David se levantó y cortó calladamente la orla del manto de Saúl. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Sucedió después de esto que el corazón de David le golpeaba, por haber cortado la orilla del manto de Saúl. |
¿Cómo, pues, menospreciando a Yahvé, has hecho lo que es malo a sus ojos? Has herido a espada a Urías, jeteo; tomaste por mujer a su mujer, y a él le mataste con la espada de los hijos de Amón.'
David sintió latir su corazón cuando hubo hecho el censo del pueblo, y dijo a Yahvé: “He pecado gravemente al hacer esto. Ahora, ¡oh Yahvé! perdona, te ruego, la iniquidad de tu siervo, pues he obrado como un insensato.”
por haberse conmovido tu corazón y haberte humillado ante Yahvé al oír lo que yo he anunciado contra este lugar y contra sus habitantes, que serán objeto de espanto y de execración; por haber rasgado tus vestiduras y haber llorado ante mí, yo también te he oído a ti, dice Yahvé,'
La merced de mi Dios me precederá; Dios me hará ver a mis enemigos (humillados).'
Abisaí dijo a David: “Dios ha entregado hoy en tus manos a tu enemigo. Déjame que ahora mismo le atraviese con mi lanza y de un golpe le clave en la tierra; no tendré que repetir.”