Y dijo Isaac a su hijo: “¿Cómo tan pronto hallaste, hijo mío?,” y le respondió: “Porque hizo Yahvé, tu Dios, que se me pusiera delante.”
1 Samuel 21:2 - Biblia Nacar-Colunga Llegó David a Nob, donde estaba Ajimelec, sacerdote, que le salió, asustado, al encuentro y le dijo: “¿Cómo vienes tú solo, sin que nadie te acompañe?” Dugang nga mga bersyonBiblia Reina Valera 1960 Y respondió David al sacerdote Ahimelec: El rey me encomendó un asunto, y me dijo: Nadie sepa cosa alguna del asunto a que te envío, y lo que te he encomendado; y yo les señalé a los criados un cierto lugar. Biblia Nueva Traducción Viviente —El rey me envió en un asunto privado —dijo David—. Me pidió que no le contara a nadie por qué estoy aquí. Les dije a mis hombres dónde buscarme después. Biblia Católica (Latinoamericana) David llegó a Nob, a la casa del sacerdote Ajimelec. Este salió temblando al encuentro de David y le preguntó: '¿Por qué estás solo? ¿Por qué no hay nadie contigo?' La Biblia Textual 3a Edicion Y David respondió al sacerdote Ahimelec: El rey me encomendó un asunto, y me dijo: Nadie sepa del asunto a que te envío y que te he ordenado. Y yo he citado a los jóvenes en cierto lugar. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Llegó David a Nob, ante el sacerdote Ajimélec, que salió atemorizado a su encuentro, y le preguntó: '¿Por qué vienes tú solo, sin que nadie te acompañe?'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y respondió David al sacerdote Ahimelec: El rey me encomendó un asunto, y me dijo: Nadie sepa cosa alguna de este asunto a que yo te envío, y que yo te he mandado; y yo señalé a los criados un cierto lugar. |
Y dijo Isaac a su hijo: “¿Cómo tan pronto hallaste, hijo mío?,” y le respondió: “Porque hizo Yahvé, tu Dios, que se me pusiera delante.”
Todavía le preguntó: “¿De verdad eres tú mi hijo Esaú?,” y él contestó: “Yo soy.”
Pero él le dijo: “Yo también soy profeta como tú, y un ángel me ha hablado de parte de Yahvé, diciéndome: Tráele contigo a tu casa para que coma pan y beba agua.” Mentía,
Aparta de mí el camino de la mentira y otórgame la gracia de tu ley.
Pon, Yahvé, guardia a mi boca, centinelas a la puerta de mis labios,
Hoy todavía hace alto en Nob, y alza su mano contra el monte de la hija de Sión, contra el monte de Jerusalén.
pues antes de venir algunos de los de Santiago, comía con los gentiles; pero en cuanto aquéllos llegaron, se retraía y apartaba, por miedo a los de la circuncisión.'
No os engañéis unos a otros; despojaos del nombre viejo con todas sus obras,'
Saúl dijo a Micol: “¿Por qué me has engañado así y has dejado escapar a mi enemigo para que se ponga a salvo?” Micol respondió a Saúl: “Me dijo: Déjame ir o te mato.”
David le respondió: “Me ha dado el rey una orden y me ha dicho: Que nadie sepa nada del asunto por que te envío ni de la orden que te he dado. A los mozos les he dicho que se reúnan en tal lugar.
David dijo a Abiatar: “Ya pensé yo aquel día que Doeg, edomita, que estaba en Nob, no dejaría de informar a Saúl. Soy yo la causa de la muerte de toda la casa de tu padre.
Doeg el edomita, que estaba entre los servidores de Saúl, respondió: “Yo he visto al hijo de Isaí en Nob con Ajimelec, hijo de Ajitob.”