No lo propaléis en Gat, no lo publiquéis por las calles de Ascalón; que no se regocijen las hijas de los filisteos V no salten de júbilo las hijas de los incircuncisost'
1 Samuel 14:6 - Biblia Nacar-Colunga Jonatán dijo a su escudero: “Anda, vamos a pasar al puesto de los incircuncisos; puede ser que Yahvé nos ayude, pues nada le impide salvar con muchos o con pocos.” Dugang nga mga bersyonBiblia Reina Valera 1960 Dijo, pues, Jonatán a su paje de armas: Ven, pasemos a la guarnición de estos incircuncisos; quizá haga algo Jehová por nosotros, pues no es difícil para Jehová salvar con muchos o con pocos. Biblia Nueva Traducción Viviente —Crucemos hasta la avanzada de esos paganos —le dijo Jonatán a su escudero—. Tal vez el Señor nos ayude, porque nada puede detener al Señor. ¡Él puede ganar la batalla ya sea que tenga muchos guerreros o solo unos cuantos! Biblia Católica (Latinoamericana) Jonatán dijo al joven que llevaba sus armas: 'Vamos y atravesemos hasta el puesto de esos incircuncisos. A lo mejor Yavé hace algo por nosotros, porque nada detiene a Yavé. Ya sea con muchos o con pocos, él puede siempre salvar'. La Biblia Textual 3a Edicion Y Jonatán dijo a su joven escudero: Ven, pasemos a la guarnición de esos incircuncisos. Quizá YHVH actúe por nosotros, porque para YHVH no hay impedimento en salvar con muchos o con pocos. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Jonatán dijo a su escudero. 'Ven; vamos a pasar al puesto de esos incircuncisos. Quizá Yahveh haga algo por nosotros, porque nada le impide a Yahveh dar la victoria con muchos o con pocos'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Dijo, pues, Jonatán a su criado que le traía las armas: Ven, pasemos a la guarnición de estos incircuncisos; quizá Jehová haga algo por nosotros; que no es difícil para Jehová salvar con muchos o con pocos. |
No lo propaléis en Gat, no lo publiquéis por las calles de Ascalón; que no se regocijen las hijas de los filisteos V no salten de júbilo las hijas de los incircuncisost'
Quizá Yahvé mirará mi aflicción y me pagará con favores las maldiciones de hoy.”
¿No habrá oído Dios las palabras del copero mayor, que el rey de Asiría, su señor, ha mandado para insultar al Dios vivo, y dejará Yahvé, tu Dios, de castigar las palabras que ha oído? Haz, pues, subir a El una plegaria por el resto que aún queda.”
Clamó Asa a Yahvé, su Dios, diciendo: “Yahvé, no hay para ti diferencia entre socorrer al que tiene muchas fuerzas o al que tiene pocas. Ven, pues, en ayuda nuestra, Yahvé, nuestro Dios, porque en ti nos apoyamos nosotros, y a combatir en tu nombre hemos venido contra toda esta muchedumbre. Yahvé, tú eres nuestro Dios; que no sea el hombre quien triunfe de ti.”
Yahvé deshizo a los cusitas ante Asa y ante Judá, y los cusitas se pusieron en fuga.
Yahvé hace cuanto quiere en los cielos y en la tierra, en el mar y en todos los abismos.
(24) El que se gloríe, gloríese en esto: en ser inteligente y conocerme a mí, pues yo soy Yahvé, que hago misericordia, derecho y justicia sobre la tierra, pues en esto es en lo que yo me complazco, oráculo de Yahvé.
(26) A Egipto, a Judá, a Edom, a los hijos de Ammón, a Moab, a los que se rapan las sienes y habitan el desierto, pues todos estos pueblos son incircuncisos; pero todo Israel es incircunciso de corazón.'
Aborreced el mal y amad el bien y haced justicia en las puertas; quizá Yahvé, Dios de los ejércitos, tenga piedad del resto de José.'
Buscad a Yahvé los humildes de la tierra, que practicáis su ley; buscad la justicia, buscad la mansedumbre; quizá quedaréis al abrigo de la ira de Yahvé.'
Entonces él me habló, diciendo: He aquí la palabra de Yahvé a Zorobabel. Dice: No con ejército, no con fuerza, sino por mi espíritu, dice Yahvé de los ejércitos.
Mirándolos, Jesús les dijo: Para los hombres, imposible; mas para Dios todo es posible.'
¿Qué diremos, pues, a esto? Si Dios está por nosotros, ¿quién contra nosotros?
¿Cómo puede uno solo perseguir a mil, y dos poner en fuga a diez mil, sino porque su Roca se los vendió y Yahvé los ha entregado?
Porque la circuncisión somos nosotros, los que servimos en el Espíritu de Dios y nos gloriamos en Cristo Jesús y no ponemos nuestra confianza en la carne.
Dame, pues, este monte, de que habló Yahvé aquel día, pues allí están los enaquim, y tienen ciudades grandes y fuertes; quizá quiera Yahvé estar conmigo y logre arrojarlos, según la palabra de Yahvé.”
Devorado por la sed, clamó a Yahvé, diciendo: “Eres tú el que por la mano de tu siervo has hecho esta gran liberación; ¿voy a caer ahora, muerto de sed, en la mano de los incircuncisos?”
Uno de ellos se alza al norte, enfrente de Mijmas, y el otro al mediodía, enfrente de Gueba.
Su escudero le respondió: “Haz lo que quieras. Donde tú vayas, pronto estoy a seguirte.”
David preguntó a los que tenía cerca: “¿Qué darán al que mate a este filisteo y arranque a Israel la afrenta? ¿Quién es ese filisteo, ese incircunciso, para insultar así al ejército del Dios vivo?”
Tu siervo ha matado leones y osos, y ese filisteo incircunciso será como uno de ellos. ¿No seré capaz de ir, de batirle y quitarle y quitar el oprobio de Israel? Porque ¿quién es ese incircunciso que ha insultado al ejército del Dios vivo?”
Hoy te entregará Yahvé en mis manos; yo te heriré, te cortaré la cabeza y daré tu cadáver y los del ejército de los filisteos a las aves del cielo y a los animales de la tierra; y sabrá así toda la tierra que Israel tiene un Dios,'
y sabrán todos éstos que no por la espada ni por la lanza salva Yahvé, porque él es el Señor de la guerra, y os entregará en nuestras manos.”
y dijo a su escudero: “Saca tu espada y traspásame, no me hieran esos incircuncisos y me afrenten.” El escudero no obedeció, por el gran temor que tenía; y tomando Saúl su propia espada, se echó sobre la punta de ella.'