Pues tú haces lucir mi lámpara, joh Yahvé! tú, mi Dios, que iluminas mis tinieblas.
1 Samuel 14:13 - Biblia Nacar-Colunga y sirviéndose de manos y pies, subió Jonatán, seguido de su escudero. Los filisteos volvieron la espalda ante Jonatán, que los hería, mientras detrás de él los mataba el escudero. Dugang nga mga bersyonBiblia Reina Valera 1960 Y subió Jonatán trepando con sus manos y sus pies, y tras él su paje de armas; y a los que caían delante de Jonatán, su paje de armas que iba tras él los mataba. Biblia Nueva Traducción Viviente Así que escalaron usando pies y manos. Entonces los filisteos caían ante Jonatán, y su escudero mataba a los que venían por detrás. Biblia Católica (Latinoamericana) Jonatán subió escalando con manos y pies, y su compañero lo seguía. Los filisteos caían ante Jonatán y su compañero los remataba detrás de él. La Biblia Textual 3a Edicion Y Jonatán trepó con pies y manos, y su escudero tras él. Y los que caían ante Jonatán, su escudero los remataba detrás de él. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Subió Jonatán valiéndose de pies y manos, y tras él su escudero. Los filisteos caían ante Jonatán, y su escudero los iba rematando detrás de él. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y subió Jonatán trepando con sus manos y sus pies, y tras él su paje de armas; y los que caían delante de Jonatán, su paje de armas que iba tras él, los mataba. |
Pues tú haces lucir mi lámpara, joh Yahvé! tú, mi Dios, que iluminas mis tinieblas.
¿Qué diremos, pues, a esto? Si Dios está por nosotros, ¿quién contra nosotros?
Pondrá Yahvé a tus enemigos, los que contra ti se alcen, en derrota delante de ti; vendrán contra ti por un camino y por siete caminos huirán delante de ti.'
¿Cómo puede uno solo perseguir a mil, y dos poner en fuga a diez mil, sino porque su Roca se los vendió y Yahvé los ha entregado?
extinguieron la violencia del fuego, escaparon al filo de la espada, convalecieron de la enfermedad, se hicieron fuertes en la guerra, desbarataron los campamentos de los extranjeros.
Uno solo de vosotros perseguía a mil, porque Yahvé, vuestro Dios, combatía por vosotros, como os lo había dicho.
Llamó él en seguida a su escudero, y le dijo: “Saca tu espada y mátame, para que no pueda decirse que me mató una mujer.” El joven le traspasó, y murió Abimelec.
y, dirigiéndose a Jonatán y a su escudero, dijeron: “Subid a nosotros y os enseñaremos una cosa.” Jonatán dijo al escudero: “Sube detrás de mí, que Yahvé los ha puesto en manos de Israel.”
Esta primera matanza que hizo Jonatán y su escudero fue de unos veinte hombres; en un espacio como de la mitad de una yugada.'