Amos respondió a Amasias, diciendo: Yo no soy profeta ni hijo de profeta, sino que soy boyero y cultivador de sicómoros.
1 Samuel 10:11 - Biblia Nacar-Colunga Cuantos de antes le conocían se preguntaban: “¿Qué le ha pasado al hijo de Quis? ¡Saúl entre los profetas!” Dugang nga mga bersyonBiblia Reina Valera 1960 Y aconteció que cuando todos los que le conocían antes vieron que profetizaba con los profetas, el pueblo decía el uno al otro: ¿Qué le ha sucedido al hijo de Cis? ¿Saúl también entre los profetas? Biblia Nueva Traducción Viviente Cuando los que conocían a Saúl se enteraron de lo sucedido, exclamaron: «¿Qué? ¿Hasta Saúl es profeta? ¿Cómo se convirtió el hijo de Cis en profeta?». Biblia Católica (Latinoamericana) Al verlo que profetizaba junto con los profetas, todos los que lo conocían de antes se decían unos a otros: '¿Qué le pasó al hijo de Quis? ¿Así que Saúl entró a los profetas?' La Biblia Textual 3a Edicion Y sucedió que cuando todos los que lo conocían anteriormente vieron que ahora profetizaba con los profetas, los del pueblo se decían unos a otros: ¿Qué le ha sucedido al hijo de Cis? ¿También Saúl entre los profetas? Biblia Serafín de Ausejo 1975 Y todos los que lo conocían de antes, al verlo arrebatado de entusiasmo en medio de los profetas, se preguntaban unos a otros: '¿Qué le ha pasado al hijo de Quis? ¿También Saúl entre los profetas?'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y aconteció que, cuando todos los que le conocían antes, vieron como profetizaba con los profetas, el pueblo decía el uno al otro: ¿Qué ha sucedido al hijo de Cis? ¿También Saúl entre los profetas? |
Amos respondió a Amasias, diciendo: Yo no soy profeta ni hijo de profeta, sino que soy boyero y cultivador de sicómoros.
Yahvé me tomó detrás del ganado y me dijo: Ve a profetizar a mi pueblo, Israel.
Admirábanse los judíos, diciendo: ¿Cómo es que éste, no habiendo estudiado, sabe letras?
reconoció ser el mismo que se sentaba a pedir limosna en la puerta Hermosa del templo, y quedaron llenos de admiración y espanto por lo sucedido.
Viendo la libertad de Pedro y Juan, y considerando que eran hombres sin letras y plebeyos, se maravillaban, pues los habían conocido de que estaban con Jesús;'
y cuantos le oían quedaban fuera de sí, diciendo: ¿No es éste el que en Jerusalén perseguía a cuantos invocaban este nombre, y que a esto venía aquí, para llevarlos atados a los sumos sacerdotes?
y, quitándose sus vestiduras, profetizó él también ante Samuel, y se estuvo desnudo por tierra todo aquel día y toda la noche. De ahí el proverbio: “¿También Saúl entre los profetas?”