Pero los salvó por mor de su nombre, para hacer muestra de su poder.
1 Juan 2:12 - Biblia Nacar-Colunga Os escribo, hijitos, porque por su nombre os han sido perdonados los pecados. Dugang nga mga bersyonBiblia Reina Valera 1960 Os escribo a vosotros, hijitos, porque vuestros pecados os han sido perdonados por su nombre. Biblia Nueva Traducción Viviente Les escribo a ustedes, que son hijos de Dios, porque sus pecados han sido perdonados por medio de Jesús. Biblia Católica (Latinoamericana) Esto les escribo, hijitos: ustedes recibieron ya el perdón de sus pecados. La Biblia Textual 3a Edicion Os escribo a vosotros, hijitos, porque los pecados os han sido perdonados a causa de su nombre. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Os escribo, hijitos, porque por su nombre se os han perdonado los pecados. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Os escribo a vosotros, hijitos, porque vuestros pecados os son perdonados por su nombre. |
Pero los salvó por mor de su nombre, para hacer muestra de su poder.
Lámed. Por amor de tu nombre, oh Yahvé! perdona mis ofensas, por grandes que sean.
Aunque nuestras maldades clamen contra nosotros, obra, Yahvé, por la gloria de tu nombre. Porque muchas son nuestras rebeldías. Hemos pecado contra ti.
y que se predicase en su nombre la conversión y la remisión de los pecados a todas las naciones, comenzando por Jerusalén.
De El dan testimonio todos los profetas, que dicen que por su nombre cuantos crean en El recibirán el perdón de los pecados.
Sabed, pues, hermanos, que por éste se os anuncia la remisión de los pecados y de todo cuanto por la Ley de Moisés no podíais ser justificados.
En ningún otro hay salud, pues ningún otro nombre nos ha sido dado bajo el cielo, entre los hombres, por el cual podamos ser salvos.”
Y algunos esto erais, pero habéis sido lavados; habéis sido santificados; habéis sido justificados en el nombre del Señor Jesucristo y por el Espíritu de nuestro Dios.'
en quien tenemos la redención por la virtud de su sangre, la remisión de los pecados, según las riquezas de su gracia,
Sed más bien unos para otros bondadosos, compasivos, y perdonaos los unos a los otros, como Dios os ha perdonado en Cristo.
Pero si andamos en la luz, como El está en la luz, entonces estamos en comunión unos con otros y la sangre de Jesús, su Hijo, nos purifica de todo pecado.
Si confesamos nuestros pecados, fiel y justo es El para perdonarnos y limpiarnos de toda iniquidad.
sino porque la conocéis, y sabéis que la mentira no procede de la verdad.
Carísimos, no os escribo un mandato nuevo, sino un mandato antiguo que tenéis desde el principio. Y ese mandato antiguo es la palabra que habéis oído.