El que halla una buena mujer, halla un tesoro, ha recibido un gran favor de Yahvé.
1 Corintios 7:2 - Biblia Nacar-Colunga mas por evitar la fornicación, tenga cada uno su mujer, y cada una tenga su marido. Dugang nga mga bersyonBiblia Reina Valera 1960 pero a causa de las fornicaciones, cada uno tenga su propia mujer, y cada una tenga su propio marido. Biblia Nueva Traducción Viviente Sin embargo, dado que hay tanta inmoralidad sexual, cada hombre debería tener su propia esposa, y cada mujer su propio marido. Biblia Católica (Latinoamericana) Pero no ignoren las exigencias del sexo; por eso, que cada hombre tenga su esposa y cada mujer su marido. La Biblia Textual 3a Edicion Pero por causa de las fornicaciones, cada uno tenga su propia mujer, y cada una su propio marido. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Pero, a causa del peligro de incontinencia, que cada uno tenga su mujer, y cada mujer tenga su propio marido. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Mas para evitar fornicaciones, cada varón tenga su propia esposa, y cada mujer tenga su propio marido. |
El que halla una buena mujer, halla un tesoro, ha recibido un gran favor de Yahvé.
Casa y hacienda herencia son de los padres, pero una mujer prudente es don de Yahvé.
y preguntáis: ¿Por qué? Porque Yahvé toma la defensa de las esposas de tu juventud, a la que has sido desleal, siendo ella tu compañera, y la esposa de tu alianza matrimonial.
Pero yo os digo que quien repudia a su mujer — excepto el caso de fornicación — la expone al adulterio, y el que se casa con la repudiada, comete adulterio.
Huid la fornicación. Cualquier pecado que cometa un hombre, fuera de su cuerpo queda; pero el que fornica peca contra su propio cuerpo.'
Comenzando a tratar de lo que me habéis escrito, bueno es al hombre no tocar mujer;'
Pero si no pueden guardar continencia, cásense, que mejor es casarse que abrasarse.
Así los maridos deben amar a sus mujeres como a su propio cuerpo. El que ama a su mujer, a sí mismo se ama,
Por lo demás, ame cada uno a su mujer, y ámela como a sí mismo, y la mujer reverencie a su marido.
que prohiben el matrimonio y el uso de alimentos creados por Dios, para que los fieles conocedores de la verdad los tomen con ha cimiento de gracias.
Si los padres o los hermanos vienen a reclamárnoslas, les diremos: Dejadlos en paz, pues con las de Tabes Galaad tomadas en guerra no ha habido una para uno y no habéis sido vosotros los que se las habéis dado, que lo entonces seríais culpables,”