Online nga Bibliya

Mga paanunsiyo


Ang tibuok bibliya Daang Tugon Bag-ong Tugon




Proverbios 9:7 - Biblia Spanish Sagradas Escrituras

El que castiga al burlador, afrenta se acarrea; el que reprende al impío, se atrae mancha.

Tan-awa ang kapitulo
Ipakita Interlinear Bible

Dugang nga mga bersyon

Biblia Reina Valera 1960

El que corrige al escarnecedor, se acarrea afrenta; El que reprende al impío, se atrae mancha.

Tan-awa ang kapitulo

Biblia Nueva Traducción Viviente

El que reprende a un burlón recibirá un insulto a cambio; el que corrige al perverso saldrá herido.

Tan-awa ang kapitulo

Biblia Católica (Latinoamericana)

El que le llama la atención a un burlón se atrae sus insultos; el que corrige a un malvado corre el riesgo de que lo humillen.

Tan-awa ang kapitulo

La Biblia Textual 3a Edicion

Quien corrige al cínico se acarrea insultos, Quien amonesta al malvado, desprecios.

Tan-awa ang kapitulo

Biblia Serafín de Ausejo 1975

Quien reprende al insolente se acarrea desprecio, quien corrige al perverso se busca ultrajes.

Tan-awa ang kapitulo

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

El que corrige al escarnecedor, se acarrea afrenta: El que reprende al impío, se atrae mancha.

Tan-awa ang kapitulo
Ubang mga hubad



Proverbios 9:7
13 Cross References  

Y cuando Acab vio a Elías, le dijo Acab: ¿Eres tú el que turbas a Israel?


Y Acab dijo a Elías: ¿Me has hallado, enemigo mío? Y él respondió: Te he encontrado, porque te has vendido a mal hacer delante del SEÑOR,


Entonces se acercó Sedequías hijo de Quenaana, e hirió a Micaías en la mejilla, diciendo: ¿Por dónde se fue de mí el espíritu del SEÑOR para hablarte a ti?


y dirás: Así dijo el rey: Echad a éste en la cárcel, y mantenedle con pan de angustia y con agua de angustia, hasta que yo vuelva en paz.


Mas ellos hacían escarnio de los mensajeros de Dios, y menospreciaban sus palabras, burlándose de sus profetas, hasta que subió el furor del SEÑOR contra su pueblo, y que no hubo remedio.


He aquí, que bienaventurado es el hombre a quien Dios castiga; por tanto no menosprecies la corrección del Todopoderoso.


El hijo sabio toma el castigo del padre; mas el burlador no escucha la reprensión.


El burlador no ama al que le corrige; ni se allega a los sabios.


No hables a oídos del loco; porque menospreciará la prudencia de tus razones.


Mas callaron, y no le respondieron palabra, porque el Rey así lo había mandado, diciendo: No le respondáis.