Mas Jehú no cuidó de andar en la ley del SEÑOR Dios de Israel con todo su corazón, ni se apartó de los pecados de Jeroboam, el que había hecho pecar a Israel.
Proverbios 4:23 - Biblia Spanish Sagradas Escrituras Sobre toda cosa guardada, guarda tu corazón; porque de él mana la vida. Dugang nga mga bersyonBiblia Reina Valera 1960 Sobre toda cosa guardada, guarda tu corazón; Porque de él mana la vida. Biblia Nueva Traducción Viviente Sobre todas las cosas cuida tu corazón, porque este determina el rumbo de tu vida. Biblia Católica (Latinoamericana) Primero que nada, vigila tu corazón, porque en él está la fuente de la vida. La Biblia Textual 3a Edicion Sobre toda cosa guardada, guarda tu corazón, Porque de él mana la vida. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Por encima de todo, vigila tu corazón, porque de él procede la vida. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Con toda diligencia guarda tu corazón; porque de él mana la vida. |
Mas Jehú no cuidó de andar en la ley del SEÑOR Dios de Israel con todo su corazón, ni se apartó de los pecados de Jeroboam, el que había hecho pecar a Israel.
El que guarda su boca guarda su alma; mas el que mucho abre sus labios tendrá calamidad.
El camino de los rectos es apartarse del mal; el que guarda su camino guarda su alma.
Espinas y lazos hay en el camino del perverso; el que guarda su alma se alejará de ellos.
El que confía en su corazón es loco; mas el que camina en sabiduría, será salvo.
Hijo mío, no se aparten de tus ojos; guarda la sabiduría y el consejo;
Sabiduría primero que todo; adquiere sabiduría; y ante toda tu posesión adquiere inteligencia.
Hay otra enfermedad maligna que he visto debajo del sol: las riquezas guardadas por sus dueños para su mal;
Engañoso es el corazón más que todas las cosas, y perverso; ¿quién lo conocerá?
Mas lo que sale de la boca, del mismo corazón sale; y esto contamina al hombre.
Porque del corazón salen los malos pensamientos: muertes, adulterios, fornicaciones, hurtos, falsos testimonios, maledicencias.
Velad y orad, no entréis en tentación; el espíritu a la verdad es presto, mas la carne enferma.
El buen hombre del buen tesoro de su corazón saca bien; y el mal hombre del mal tesoro de su corazón saca mal; porque de la abundancia del corazón habla su boca.
Por tanto, guárdate, y guarda tu alma con diligencia, que no te olvides de las cosas que tus ojos han visto, ni se aparten de tu corazón todos los días de tu vida; y las enseñarás a tus hijos, y a los hijos de tus hijos.
Mirando bien que ninguno se aparte de la gracia de Dios; que ninguna raíz de amargura brotando os impida, y por ella muchos sean contaminados.