Proverbios 4:10 - Biblia Spanish Sagradas Escrituras Oye, hijo mío, y recibe mis razones; y se te multiplicarán años de vida. Dugang nga mga bersyonBiblia Reina Valera 1960 Oye, hijo mío, y recibe mis razones, Y se te multiplicarán años de vida. Biblia Nueva Traducción Viviente Hijo mío, escúchame y haz lo que te digo, y tendrás una buena y larga vida. Biblia Católica (Latinoamericana) Atiéndeme, pues, hijo mío, toma en serio mis palabras, y vivirás largos años. La Biblia Textual 3a Edicion Oye, hijo mío, y recibe mis razones, Y se te multiplicarán años de vida. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Escucha, hijo mío, acoge mis palabras y se te prolongarán los años de vida. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Oye, hijo mío, y recibe mis palabras, y se te multiplicarán años de vida. |
Escucha el consejo, y recibe el castigo, para que seas sabio en tu vejez.
Hijo mío, si tomares mis palabras, y mis mandamientos guardares dentro de ti,
Largura de días trae en su mano derecha; en su izquierda riquezas y honra.
Oíd, pues, oh mujeres, palabra del SEÑOR, y vuestro oído reciba la palabra de su boca; y enseñad endechas a vuestras hijas, y cada una a su amiga, lamentación.
para que sean aumentados vuestros días, y los días de vuestros hijos, sobre la tierra que juró el SEÑOR a vuestros padres que les había de dar, como los días de los cielos sobre la tierra.
Honra a tu padre y a tu madre, como el SEÑOR tu Dios te ha mandado, para que sean prolongados tus días, y para que te vaya bien sobre la tierra que el SEÑOR tu Dios te da.
Para que temas al SEÑOR tu Dios, guardando todos sus estatutos y sus mandamientos que yo te mando, tú, y tu hijo, y el hijo de tu hijo, todos los días de tu vida, y que tus días sean prolongados.
Por lo cual, también nosotros damos gracias a Dios sin cesar, de que habiendo recibido de nosotros la palabra para oír de Dios, la recibisteis no como palabra de hombres, sino (como a la verdad lo es) como palabra de Dios, la cual obra en vosotros los que creisteis.
Palabra fiel y digna de ser recibida de todos: que el Cristo Jesús vino al mundo para salvar a los pecadores, de los cuales yo soy el primero.