Porque el SEÑOR conoce el camino de los justos; y el camino de los malos se perderá.
Proverbios 15:9 - Biblia Spanish Sagradas Escrituras Abominación es al SEÑOR el camino del impío; mas él ama al que sigue justicia. Dugang nga mga bersyonBiblia Reina Valera 1960 Abominación es a Jehová el camino del impío; Mas él ama al que sigue justicia. Biblia Nueva Traducción Viviente El Señor detesta el camino de los perversos, pero ama a quienes siguen la justicia. Biblia Católica (Latinoamericana) Yavé detesta a los que se portan mal, pero ama al que busca el bien. La Biblia Textual 3a Edicion YHVH aborrece el camino del malvado, Pero ama a quien va en pos de la justicia. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Yahveh abomina la conducta del malvado; pero ama al que va tras la justicia. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Abominación es a Jehová el camino del impío; mas Él ama al que sigue la justicia. |
Porque el SEÑOR conoce el camino de los justos; y el camino de los malos se perderá.
Porque el justo SEÑOR amó las justicias, al recto mirará su rostro.
y ve si hay en mí camino de perversidad, y guíame en el camino eterno.
No estarán los locos que se gobiernan por afecto o consejo de la carne delante de tus ojos; aborreces a todos los que obran iniquidad.
El castigo es molesto al que deja el camino; mas el que aborreciere la corrección, morirá.
El que sigue la justicia y la misericordia, hallará la vida, la justicia, y la honra.
Altivez de ojos, y orgullo de corazón, que es la candela de los impíos, es pecado.
El camino del hombre perverso es torcido y extraño; mas la obra del limpio es recta.
El camino de los impíos es como la oscuridad; no saben en qué tropiezan.
El temor del SEÑOR es aborrecer el mal; la soberbia, la arrogancia, el mal camino, y la boca perversa, aborrezco.
El camino del justo es rectitud; tú, recto, pesas el camino del justo.
Oídme, los que seguís justicia, los que buscáis al SEÑOR: mirad a la piedra de donde fuisteis cortados, y a la caverna de la fosa de donde fuisteis arrancados.
Oídme, los que conocéis justicia, pueblo en cuyo corazón está mi ley: No temáis afrenta de hombre, ni desmayéis por sus denuestos;
Y envié a vosotros a todos mis siervos los profetas, madrugando y enviándolos, diciendo: No hagáis ahora esta cosa abominable que yo aborrezco.
Y conoceremos, y proseguiremos en conocer al SEÑOR, como el alba está aparejada su salida, y vendrá a nosotros como la lluvia, como la lluvia tardía y temprana a la tierra.
Limpio eres de ojos para no ver el mal, ni puedes ver el agravio; ¿por qué ves a los menospreciadores, y callas cuando destruye el impío al más justo que él.
Entrad por la puerta estrecha: porque el camino que lleva a perdición es ancho y espacioso; y los que van por él, son muchos.
y te amará, y te bendecirá, y te multiplicará; y bendecirá el fruto de tu vientre, y el fruto de tu tierra, y tu grano, y tu mosto, y tu aceite, la cría de tus vacas, y los rebaños de tus ovejas, en la tierra que juró a tus padres que te daría.
Mas tú, oh hombre de Dios, huye de estas cosas, y sigue la justicia, la piedad, la fe, la caridad, la tolerancia, la mansedumbre.
Huye también de los deseos juveniles; y sigue la justicia, la fe, la caridad, la paz, con los que invocan al Señor de limpio corazón.