¿Qué dios de todos los dioses de las provincias ha librado a su provincia de mi mano, para que libre el SEÑOR de mi mano a Jerusalén?
Oseas 13:4 - Biblia Spanish Sagradas Escrituras Mas yo soy el SEÑOR tu Dios desde la tierra de Egipto; por tanto no conocerás Dios fuera de mí, ni otro salvador sino a mí. Dugang nga mga bersyonBiblia Reina Valera 1960 Mas yo soy Jehová tu Dios desde la tierra de Egipto; no conocerás, pues, otro dios fuera de mí, ni otro salvador sino a mí. Biblia Nueva Traducción Viviente «He sido el Señor tu Dios desde que te saqué de Egipto. No debes reconocer a ningún otro Dios aparte de mí, porque no hay otro salvador. Biblia Católica (Latinoamericana) Sin embargo, yo soy Yavé, tu Dios, desde la tierra de Egipto; no conoces otro Dios fuera de mí, ni tienes más Salvador que yo. La Biblia Textual 3a Edicion Sin embargo, desde la tierra de Egipto Yo soy YHVH tu Dios:° No tendrás otros dioses aparte de mí, Ni otro Salvador, sino a mí. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Pero yo soy Yahveh, tu Dios desde el país de Egipto. No reconocerás a otro Dios fuera de mí; ni hay otro salvador que yo. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Mas yo soy Jehová tu Dios desde la tierra de Egipto; no conocerás dios fuera de mí, ni otro salvador sino a mí. |
¿Qué dios de todos los dioses de las provincias ha librado a su provincia de mi mano, para que libre el SEÑOR de mi mano a Jerusalén?
Porque yo soy el SEÑOR, Dios tuyo, el Santo de Israel, guardador tuyo. A Egipto he dado por tu rescate, a Etiopía y a Seba por ti.
Cuando Israel era muchacho, yo lo amé, y de Egipto llamé a mi hijo.
Y hablé por los profetas, y yo aumenté las visiones, y por mano de los profetas puse semejanzas.
Pero yo soy el SEÑOR tu Dios desde la tierra de Egipto; aún te haré morar en tiendas, como en los días de la fiesta.
Y le daré sus viñas desde allí, y el valle de Acor por puerta de esperanza; y allí cantará como en los tiempos de su juventud, y como en el día de su subida de la tierra de Egipto.
Y en ningún otro hay salud; porque no hay otro nombre debajo del cielo, dado a los hombres, en que podamos ser salvos.