Y endechó Jeremías por Josías, y todos los cantores y cantoras recitan sus lamentaciones sobre Josías hasta hoy; y las han vuelto en ley en Israel, las cuales están escritas en las Lamentaciones.
Mateo 9:23 - Biblia Spanish Sagradas Escrituras Y llegado Jesús a casa del principal, viendo los tañedores de flautas, y la multitud que hacía bullicio, Dugang nga mga bersyonBiblia Reina Valera 1960 Al entrar Jesús en la casa del principal, viendo a los que tocaban flautas, y la gente que hacía alboroto, Biblia Nueva Traducción Viviente Cuando Jesús llegó a la casa del oficial, vio a una ruidosa multitud y escuchó la música del funeral. Biblia Católica (Latinoamericana) Al llegar Jesús a la casa del jefe, vio a los flautistas y el alboroto de la gente. La Biblia Textual 3a Edicion Cuando llegó a la casa del principal,° viendo a los flautistas y a la muchedumbre que alborotaba, Biblia Serafín de Ausejo 1975 Cuando Jesús llegó a la casa del dignatario y vio a los flautistas y el tumulto que hacía la gente Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y cuando Jesús llegó a casa del principal, y vio los tañedores de flautas, y la gente que hacía bullicio, |
Y endechó Jeremías por Josías, y todos los cantores y cantoras recitan sus lamentaciones sobre Josías hasta hoy; y las han vuelto en ley en Israel, las cuales están escritas en las Lamentaciones.
Y morirán en esta tierra grandes y chicos; no se enterrarán, ni los endecharán, ni se arañarán, ni se mesarán por ellos;
Reprime el suspirar, no hagas luto de mortuorios; ata tu turbante sobre ti, y pon tus zapatos en tus pies, y no te cubras con rebozo, ni comas pan de consuelo.
Y dicen: Os tañimos flauta, y no bailasteis; os endechamos, y no lamentasteis.
Semejantes son a los muchachos sentados en la plaza, y que dan voces los unos a los otros, y dicen: Os tañimos con flautas, y no bailasteis; os endechamos, y no llorasteis.
Entonces descendió Pablo, y se derribó sobre él, y abrazándole, dijo: No os alborotéis, que aún su alma está en él.
Pedro entonces levantándose, fue con ellos; y cuando llegó, le llevaron al cenadero, donde le rodearon todas las viudas, llorando y mostrando las túnicas y los vestidos que Dorcas les hacía cuando estaba con ellas.
Y voz de tañedores de arpas, y de músicos, y de tañedores de flautas y de trompetas, no será más oída en ti; y todo artífice de cualquier oficio, no será más hallado en ti; y voz de muela no será más en ti oído;