Porque sació al alma menesterosa, y llenó de bien al alma hambrienta.
Mateo 5:6 - Biblia Spanish Sagradas Escrituras Bienaventurados los que tienen hambre y sed de justicia (o rectitud) , porque ellos serán saciados. Dugang nga mga bersyonBiblia Reina Valera 1960 Bienaventurados los que tienen hambre y sed de justicia, porque ellos serán saciados. Biblia Nueva Traducción Viviente Dios bendice a los que tienen hambre y sed de justicia, porque serán saciados. Biblia Católica (Latinoamericana) Felices los que tienen hambre y sed de justicia, porque serán saciados. La Biblia Textual 3a Edicion Bienaventurados los que tienen hambre y sed° de justicia, porque ellos serán saciados. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Bienaventurados los que tienen hambre y sed de justicia, porque ellos serán saciados. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Bienaventurados los que tienen hambre y sed de justicia; porque ellos serán saciados. |
Porque sació al alma menesterosa, y llenó de bien al alma hambrienta.
Resh Cumplirá el deseo de los que le temen; y su clamor oirá, y los salvará.
Yo en justicia veré tu rostro; seré saciado cuando despertaré a tu semejanza.
Como de sebo y de grosura será saciada mi alma; y con labios de alegría te alabará mi boca,
Dichoso el que tú escogieres, e hicieres llegar para que habite en tus atrios; seremos saciados del bien de tu Casa, de tu santo templo.
Codicia y aun ardientemente desea mi alma los atrios del SEÑOR; mi corazón y mi carne cantan al Dios vivo.
Lo que el impío teme, eso le vendrá; mas Dios da a los justos lo que desean.
El que sigue la justicia y la misericordia, hallará la vida, la justicia, y la honra.
Yo vine a mi huerto, oh hermana, esposa mía; he cogido mi mirra y mis aromas; he comido mi panal y mi miel, mi vino y mi leche he bebido. Comed, amigos; bebed, amados, y embriagaos.
Y el SEÑOR de los ejércitos hará en este monte a todos los pueblos convite de engordados, convite de vinos purificados, de gruesos tuétanos, de purificados líquidos.
Los pobres y menesterosos buscan las aguas, que no hay ; su lengua se secó de sed; yo, el SEÑOR, los oiré; yo , el Dios de Israel, no los desampararé.
Porque yo derramaré aguas sobre el sediento, y ríos sobre la tierra árida. Derramaré mi Espíritu sobre tu generación, y mi bendición sobre tus renuevos;
Por tanto, así dijo el Señor DIOS: He aquí que mis siervos comerán, y vosotros tendréis hambre. He aquí que mis siervos beberán, y vosotros tendréis sed; he aquí, que mis siervos se alegrarán, y vosotros seréis avergonzados;
Para que maméis y os saciéis de los pechos de sus consolaciones; para que ordeñéis, y os deleitéis con el resplandor de su gloria.
Bienaventurados los que ahora tenéis hambre; porque seréis saciados. Bienaventurados los que ahora lloráis, porque reiréis.
¡Ay de vosotros, los que estáis hartos! Porque tendréis hambre. ¡Ay de vosotros, los que ahora reís! Porque lamentaréis y lloraréis.
mas el que bebiere del agua que yo le daré, para siempre no tendrá sed; sino que el agua que yo le daré, será en él una fuente de agua que salte para vida eterna.
Trabajad no por la comida que perece, sino por la comida que a vida eterna permanece, la cual el Hijo del hombre os dará; porque a éste señaló el Padre, que es Dios.
Mas en el postrer día, el día grande de la Fiesta, se puso de pie y clamó, diciendo: Si alguno tiene sed, venga a mí y beba.
No tendrán más hambre ni sed, y el sol no caerá más sobre ellos, ni ningún otro calor;