Y ellos respondieron: Quita allá; y añadieron: Vino éste aquí para habitar como un extraño, ¿y habrá de erigirse en juez? Ahora te haremos más mal que a ellos. Y hacían gran violencia al varón, a Lot, y se acercaron para romper las puertas.
Mateo 26:61 - Biblia Spanish Sagradas Escrituras que dijeron: Este dijo: Puedo derribar el Templo de Dios, y en tres días reedificarlo. Dugang nga mga bersyonBiblia Reina Valera 1960 que dijeron: Este dijo: Puedo derribar el templo de Dios, y en tres días reedificarlo. Biblia Nueva Traducción Viviente y declararon: «Este hombre dijo: “Puedo destruir el templo de Dios y reconstruirlo en tres días”». Biblia Católica (Latinoamericana) que declararon: 'Este hombre dijo: Yo soy capaz de destruir el Templo de Dios y de reconstruirlo en tres días. La Biblia Textual 3a Edicion que dijeron: Éste dijo: Puedo derribar el santuario de Dios, y reconstruir° en tres días.° Biblia Serafín de Ausejo 1975 que declararon: 'Éste ha dicho: 'Yo puedo destruir el templo de Dios, y en tres días reconstruirlo''. Biblia Reina Valera Gómez (2023) que dijeron: Éste dijo: Puedo derribar el templo de Dios, y en tres días reedificarlo. |
Y ellos respondieron: Quita allá; y añadieron: Vino éste aquí para habitar como un extraño, ¿y habrá de erigirse en juez? Ahora te haremos más mal que a ellos. Y hacían gran violencia al varón, a Lot, y se acercaron para romper las puertas.
y dirás: Así dijo el rey: Echad a éste en la cárcel, y mantenedle con pan de angustia y con agua de angustia, hasta que yo vuelva en paz.
Después salió Jehú a los siervos de su señor, y le dijeron: ¿Hay paz? ¿Para qué entró a ti aquel loco? Y él les dijo: Vosotros conocéis al hombre y a sus palabras.
Así dijo el SEÑOR, Redentor de Israel, Santo suyo, al menospreciado de alma, al abominado de los gentiles, al siervo de los tiranos: Verán reyes, y se levantarán príncipes, y adorarán por el SEÑOR, porque fiel es el Santo de Israel, el cual te escogió.
Despreciado, y desechado entre los hombres, varón de dolores, experimentado en flaqueza; y como que escondimos de él el rostro, fue menospreciado, y no lo estimamos.
Mas los Fariseos, oyéndolo, decían: Este no echa fuera los demonios, sino por Beelzebú, príncipe de los demonios.
Y levantándose el sumo sacerdote, le dijo: ¿No respondes nada? ¿Qué testifican éstos contra ti?
Y saliendo él a la puerta, le vio otra, y dijo a los que estaban allí: También éste estaba con Jesús Nazareno.
y diciendo: Tú, el que derribas el Templo, y en tres días lo reedificas, sálvate a ti mismo. Si eres Hijo de Dios, desciende del madero.
Y arrojando las piezas de plata al Templo, salió y fue y se ahorcó.
Nosotros le hemos oído decir: Yo derribaré este Templo, que es hecho de manos, y en tres días edificaré otro hecho sin manos.
Y los que pasaban le denostaban, meneando sus cabezas, y diciendo: ¡Ah! Tú que derribas el Templo de Dios, y en tres días lo edificas,
Y comenzaron a acusarle, diciendo: A éste hemos hallado que pervierte la nación, y que veda dar tributo a César, diciendo que él es Cristo, un Rey.
Nosotros sabemos que a Moisés habló Dios; mas éste no sabemos de dónde es.
Y algunos filósofos de los epicúreos y de los estoicos, disputaban con él; y unos decían: ¿Qué quiere decir este palabrero? Y otros: Parece que es predicador de nuevos dioses; porque les predicaba a Jesús y la resurrección.
diciendo: Que éste persuade a los hombres a honrar a Dios contra la ley.
Y le oyeron hasta esta palabra; entonces alzaron la voz, diciendo: Quita de la tierra a un tal hombre, porque no conviene que viva.