diciendo: Sobre la cátedra de Moisés se sentaron los escribas y los fariseos.
Mateo 15:1 - Biblia Spanish Sagradas Escrituras Entonces llegaron a Jesús ciertos escribas y fariseos de Jerusalén, diciendo: Dugang nga mga bersyonBiblia Reina Valera 1960 Entonces se acercaron a Jesús ciertos escribas y fariseos de Jerusalén, diciendo: Biblia Nueva Traducción Viviente En ese momento, algunos fariseos y maestros de la ley religiosa llegaron desde Jerusalén para ver a Jesús. Biblia Católica (Latinoamericana) Unos fariseos y maestros de la Ley habían venido de Jerusalén. Se acercaron a Jesús La Biblia Textual 3a Edicion Entonces se acercaron a Jesús unos fariseos y escribas de Jerusalem, diciendo: Biblia Serafín de Ausejo 1975 Entonces se acercan a Jesús algunos fariseos y escribas de Jerusalén y le preguntan: Biblia Reina Valera Gómez (2023) Entonces vinieron a Jesús ciertos escribas y fariseos de Jerusalén, diciendo: |
diciendo: Sobre la cátedra de Moisés se sentaron los escribas y los fariseos.
Porque os digo, que si vuestra justicia (rectitud) no fuere mayor que la de los escribas y de los fariseos, no entraréis en el Reino de los cielos.
Pero los escribas que habían venido de Jerusalén, decían que tenía a Beelzebú; y que por el príncipe de los demonios echaba fuera los demonios.
Y aconteció un día, que él estaba enseñando, y los fariseos y doctores de la ley estaban sentados, los cuales habían venido de todas las aldeas de Galilea, y de Judea y Jerusalén; y la virtud del Señor estaba allí para sanarlos.
Entonces los escribas y los fariseos comenzaron a pensar, diciendo: ¿Quién es éste que habla blasfemias? ¿Quién puede perdonar pecados sino sólo Dios?
Y los escribas y los fariseos murmuraban contra sus discípulos, diciendo: ¿Por qué coméis y bebéis con los publicanos y pecadores?
Y éste es el testimonio de Juan, cuando los judíos enviaron de Jerusalén sacerdotes y levitas, que le preguntasen: ¿Tú, quién eres?
Y se levantó un gran clamor: y levantándose los escribas de la parte de los fariseos, contendían diciendo: Ningún mal hallamos en este hombre; que si espíritu le ha hablado, o ángel, no resistamos a Dios.
El cual venido, le rodearon los judíos que habían venido de Jerusalén, poniendo contra Pablo muchas y graves acusaciones, las cuales no podían probar;