Lucas 6:48 - Biblia Spanish Sagradas Escrituras Semejante es al hombre que edifica una casa, el cual cavó y ahondó, y puso el fundamento sobre piedra; y cuando vino una avenida, el río dio con ímpetu en aquella casa, mas no la pudo menear, porque estaba fundada sobre piedra. Dugang nga mga bersyonBiblia Reina Valera 1960 Semejante es al hombre que al edificar una casa, cavó y ahondó y puso el fundamento sobre la roca; y cuando vino una inundación, el río dio con ímpetu contra aquella casa, pero no la pudo mover, porque estaba fundada sobre la roca. Biblia Nueva Traducción Viviente Es como una persona que, para construir una casa, cava hondo y echa los cimientos sobre roca sólida. Cuando suben las aguas de la inundación y golpean contra esa casa, esta queda intacta porque está bien construida. Biblia Católica (Latinoamericana) Se parece a un hombre que construyó una casa; cavó profundamente y puso los cimientos sobre la roca; vino una inundación y la corriente se precipitó sobre la casa, pero no pudo removerla porque estaba bien construida. La Biblia Textual 3a Edicion Es semejante a un hombre que edifica una casa, el cual excavó profundamente y puso el cimiento sobre la roca; y viniendo una inundación, el torrente embistió contra aquella casa pero no pudo sacudirla por estar bien edificada.° Biblia Serafín de Ausejo 1975 Se parece a un hombre que, al ponerse a construir una casa, cavó y ahondó y puso los cimientos sobre la roca; cuando llegó la crecida, el torrente se precipitó contra aquella casa, pero no pudo derribarla, por estar bien construida. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Semejante es al hombre que edificó una casa, y cavó profundo, y puso el fundamento sobre una roca; y cuando creció la inundación, el río dio con ímpetu contra aquella casa, pero no pudo moverla; porque estaba fundada sobre la roca. |
Porque ¿qué Dios hay sino el SEÑOR? ¿O quién es fuerte sino nuestro Dios?
Viva el SEÑOR, y sea bendita mi peña; sea ensalzado el Dios, que es la roca de mi salvación.
Cuando me cercaron ondas de muerte, y arroyos de iniquidad me asombraron,
El Dios de Israel me ha dictado, el Fuerte de Israel habló): Señoreador de los hombres, justo señoreador en temor de Dios.
Por esto orará a ti todo misericordioso en el tiempo de poder hallarte; ciertamente en la inundación de las muchas aguas no llegarán éstas a él.
El solamente es mi fuerte, y mi salud; es mi refugio, no resbalaré mucho.
Venid, alegrémonos al SEÑOR; cantemos con júbilo a la roca de nuestra salud.
Cuando pasare el torbellino, el malo no será; mas el justo, fundado para siempre.
Confiad en el SEÑOR perpetuamente, porque en JAH, el SEÑOR está la fortaleza de los siglos.
por tanto, el Señor DIOS dice así: He aquí que yo fundo en Sion una piedra, piedra de fortaleza, de esquina, de precio, de cimiento cimentado; el que creyere, no se apresure.
Y temerán desde el occidente el nombre del SEÑOR; y desde el nacimiento del sol, su gloria; porque vendrá como río violento impelido por el aliento del SEÑOR.
Mas con inundación pasante hará consumación de su lugar, y tinieblas perseguirán a sus enemigos.
Todo aquel que viene a mí, y oye mis palabras, y las hace, os enseñaré a quién es semejante:
Mas el que oyó y no hizo, semejante es al hombre que edificó su casa sobre tierra, sin fundamento; en la cual el río dio con ímpetu, y luego cayó; y fue grande la ruina de aquella casa.
Estas cosas os he hablado, para que en mí tengáis paz. En el mundo tendréis apretura; mas confiad, yo he vencido al mundo.
confirmando los ánimos de los discípulos, exhortándoles a que permaneciesen en la fe, y enseñándoles que es necesario que por muchas tribulaciones entremos en el Reino de Dios.
sobreedificados sobre el fundamento de los apóstoles y de los profetas, siendo la principal piedra del ángulo, Jesús, el Cristo;
Y engrosó Jesurún (el recto ), y tiró coces; te engordaste, te engrosaste, te cubriste; y dejó al Dios que le hizo, y menospreció al Fuerte de su salud.
Del Fuerte que te crió, te has olvidado; te has olvidado del Dios tu creador.
Que el fuerte de ellos no es como nuestro Fuerte; y aun nuestros enemigos son de ello jueces.
Pero el fundamento de Dios está firme, el cual tiene este sello: Conoce el Señor a los que son suyos; y: Apártese de iniquidad todo aquel que invoca el nombre de Cristo.
Por lo cual, hermanos, procurad tanto más de hacer firme vuestra vocación y elección; porque haciendo estas cosas, no caeréis jamás.
Y ahora, hijitos, permaneced en él, para que cuando apareciere, tengamos confianza, y no seamos confundidos de él en su venida.
A aquel, pues, que es poderoso para guardaros sin pecado, y presentaros delante de su gloria irreprensibles, con grande alegría,
No hay santo como el SEÑOR; porque no hay ninguno fuera de ti; y no hay Fuerte como el Dios nuestro.