Lucas 23:26 - Biblia Spanish Sagradas Escrituras Y llevándole, tomaron a un Simón cireneo, que venía del campo, y le pusieron encima el madero para que la llevase tras Jesús. Dugang nga mga bersyonBiblia Reina Valera 1960 Y llevándole, tomaron a cierto Simón de Cirene, que venía del campo, y le pusieron encima la cruz para que la llevase tras Jesús. Biblia Nueva Traducción Viviente Cuando ellos se llevaban a Jesús, sucedió que un hombre llamado Simón, que era de Cirene, venía del campo. Los soldados lo agarraron, pusieron la cruz sobre él y lo obligaron a cargarla detrás de Jesús. Biblia Católica (Latinoamericana) Cuando lo llevaban, encontraron a un tal Simón de Cirene, que volvía del campo, y le cargaron con la cruz para que la llevara detrás de Jesús. La Biblia Textual 3a Edicion Mientras lo llevaban,° echaron mano a cierto Simón cireneo, que venía del campo, y le cargaron la cruz para que la llevara detrás de Jesús. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Cuando lo conducían, echaron mano de un tal Simón de Cirene, que volvía del campo, y lo cargaron con la cruz, para que la llevara detrás de Jesús. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y llevándole, tomaron a un Simón cireneo, que venía del campo, y le pusieron encima la cruz para que la llevase en pos de Jesús. |
Y cualquiera que no carga su madero, y viene en pos de mí, no puede ser mi discípulo.
y les soltó a aquel que había sido echado en la cárcel por sedición y una muerte, al cual habían pedido; y entregó a Jesús a la voluntad de ellos.
Y decía a todos: Si alguno quiere venir en pos de mí, niéguese a sí mismo, y tome su madero cada día, y sígame.
Había entonces en la Iglesia que estaba en Antioquía, profetas y maestros: Bernabé, y Simón el que se llamaba Niger, y Lucio Cireneo, y Manaén, que había sido criado con Herodes el tetrarca, y Saulo.
En Frigia y Panfilia, en Egipto y en las partes de Africa que está de la otra parte de Cirene, y romanos extranjeros, tanto judíos como convertidos,
a éstos presentaron delante de los apóstoles, los cuales orando les pusieron las manos encima.
Se levantaron entonces unos de la sinagoga que se llama de los libertinos, y cireneos, y alejandrinos, y de los de Cilicia, y de Asia, disputando con Esteban.