Y si alguno os dijere algo, decid: El Señor los ha menester. Y luego los dejará.
Lucas 22:11 - Biblia Spanish Sagradas Escrituras y decid al padre de la familia de la casa: El Maestro te dice: ¿Dónde está el aposento donde tengo de comer el cordero de la pascua con mis discípulos? Dugang nga mga bersyonBiblia Reina Valera 1960 y decid al padre de familia de esa casa: El Maestro te dice: ¿Dónde está el aposento donde he de comer la pascua con mis discípulos? Biblia Nueva Traducción Viviente díganle al dueño: “El Maestro pregunta: ¿Dónde está el cuarto de huéspedes en el que puedo comer la cena de Pascua con mis discípulos?”. Biblia Católica (Latinoamericana) Síganlo hasta la casa donde entre, y digan al dueño de la casa: 'El Maestro manda a decirte: ¿Dónde está la pieza en la que comeré la Pascua con mis discípulos?' La Biblia Textual 3a Edicion y decid al dueño de casa: Te dice el Maestro: ¿Dónde está el aposento en que he de comer la pascua con mis discípulos? Biblia Serafín de Ausejo 1975 Y le diréis al amo de la casa: 'El Maestro te pregunta: ¿dónde está la sala en la que voy a comer la Pascya con mis discípulos?'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) y decid al padre de familia de esa casa: El Maestro te dice: ¿Dónde está el aposento donde he de comer la pascua con mis discípulos? |
Y si alguno os dijere algo, decid: El Señor los ha menester. Y luego los dejará.
y donde entrare, decid al padre de familia: El Maestro dice: ¿Dónde está el aposento donde he de comer la Pascua con mis discípulos?
Y si alguien os preguntare, ¿por qué lo desatáis? Le responderéis así: Porque el Señor lo necesita.
Y como vino a aquel lugar Jesús, mirando, le vio, y le dijo: Zaqueo, date prisa, desciende, porque hoy es necesario que pose en tu casa.
Y él les dijo: He aquí cuando entrareis en la ciudad, os encontrará un hombre que lleva un cántaro de agua; seguidle hasta la casa donde entrare,
Y dicho esto, se fue, y llamó en secreto a María su hermana, diciendo: El Maestro está aquí y te llama.
He aquí, que yo estoy parado a la puerta y llamo; si alguno oyere mi voz, y abriere la puerta, entraré a él, y cenaré con él, y él conmigo.