y enemistad pondré entre ti y la mujer, y entre tu simiente y su simiente; ella te herirá la cabeza, y tú le herirás el calcañar.
Lucas 11:22 - Biblia Spanish Sagradas Escrituras Mas si sobreviniendo otro más fuerte que él, le venciere, le toma todas sus armas en que confiaba, y reparte sus despojos. Dugang nga mga bersyonBiblia Reina Valera 1960 Pero cuando viene otro más fuerte que él y le vence, le quita todas sus armas en que confiaba, y reparte el botín. Biblia Nueva Traducción Viviente hasta que alguien aún más fuerte lo ataca y lo vence, le quita sus armas y se lleva sus pertenencias. Biblia Católica (Latinoamericana) pero si llega uno más fuerte y lo vence, le quitará las armas en que confiaba y distribuirá todo lo que tenía. La Biblia Textual 3a Edicion pero si llega uno más fuerte que él y lo vence, le quita su armadura en la cual confiaba, y reparte sus despojos. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Pero cuando venga contra él otro más fuerte y lo venza, le quitará las armas en que confiaba y repartirá el botín. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Pero cuando viene otro más fuerte que él y lo vence, le quita todas sus armas en que confiaba, y reparte sus despojos. |
y enemistad pondré entre ti y la mujer, y entre tu simiente y su simiente; ella te herirá la cabeza, y tú le herirás el calcañar.
El enemigo dijo: Perseguiré, prenderé, repartiré despojos; mi alma se saciará de ellos; sacaré mi espada, los destruirá mi mano.
En aquel día el SEÑOR visitará con su espada dura, grande y fuerte, sobre el leviatán, serpiente huidora, y sobre el leviatán serpiente retuerta; y matará al dragón que está en el mar.
Por tanto, yo le daré parte con los grandes, y a los fuertes repartirá despojos; por cuanto derramó su alma hasta la muerte, y fue contado con los rebeldes, habiendo él llevado el pecado de muchos, y orado por los transgresores.
Cuando el fuerte armado guarda su palacio, en paz está lo que posee.
El que no es conmigo, contra mí es; y el que conmigo no recoge, desparrama.
Vestíos de toda la armadura de Dios, para que podáis estar firmes contra las asechanzas del diablo.
Por tanto, tomad toda la armadura de Dios, para que podáis resistir en el día malo, y estar firmes, acabado toda la obra .
y despojando los principados y las potestades, sacándolos a la vergüenza en público, confiadamente triunfando de ellos en él.
El que hace pecado, es del diablo, porque el diablo peca desde el principio. Para esto apareció el Hijo de Dios, para que deshaga las obras del diablo.
Hijitos, vosotros sois de Dios, y los habéis vencido; porque el que en vosotros está, es mayor que el que está en el mundo.