El pecador menosprecia a su prójimo; mas el que tiene misericordia de los pobres, es bienaventurado.
Lucas 10:37 - Biblia Spanish Sagradas Escrituras Y él dijo: El que usó con él de misericordia. Entonces Jesús le dijo: Ve, y haz tú lo mismo. Dugang nga mga bersyonBiblia Reina Valera 1960 Él dijo: El que usó de misericordia con él. Entonces Jesús le dijo: Ve, y haz tú lo mismo. Biblia Nueva Traducción Viviente El hombre contestó: —El que mostró compasión. Entonces Jesús le dijo: —Así es, ahora ve y haz lo mismo. Biblia Católica (Latinoamericana) El maestro de la Ley contestó: 'El que se mostró compasivo con él. Y Jesús le dijo: 'Vete y haz tú lo mismo. La Biblia Textual 3a Edicion Y él dijo: El que hizo la misericordia con él. Entonces Jesús le dijo: Ve y haz tú lo mismo. Biblia Serafín de Ausejo 1975 El doctor de la ley respondió: 'El que se compadeció de él'. Díjole entonces Jesús: 'Pues anda, y haz tú lo mismo'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y él dijo: El que mostró con él misericordia. Entonces Jesús le dijo: Ve, y haz tú lo mismo. |
El pecador menosprecia a su prójimo; mas el que tiene misericordia de los pobres, es bienaventurado.
Porque misericordia quise, y no sacrificio; y conocimiento de Dios más que holocaustos.
Oh hombre, él te ha declarado qué sea lo bueno, y qué pide de ti el SEÑOR: solamente hacer juicio recto , y amar misericordia, y humillarte para andar con tu Dios.
como el Hijo del hombre no vino para ser servido, sino para servir, y para dar su vida en rescate por muchos.
¡Ay de vosotros, escribas y fariseos, hipócritas! Porque diezmáis la menta y el eneldo y el comino, y dejasteis lo que es lo más importante de la ley: el juicio y la misericordia y la fe; esto era necesario hacer, y no dejar lo otro.
¿Quién, pues, de estos tres te parece que fue el prójimo de aquel que cayó entre ladrones?
Y aconteció que yendo, entró él en una aldea; y una mujer llamada Marta, le recibió en su casa.
Porque ya sabéis la gracia del Señor nuestro Jesús, el Cristo, que por amor de vosotros se hizo pobre, siendo rico; para que vosotros con su pobreza fueseis enriquecidos.
y andad en caridad, como también el Cristo nos amó, y se entregó a sí mismo por nosotros por ofrenda y sacrificio a Dios en olor suave.
Porque para esto sois llamados; pues que también el Cristo fue afligido por nosotros, dejándonos ejemplo, para que vosotros sigáis sus pisadas;
y de Jesús, el Cristo, el testigo fiel, el Primogénito de los muertos, y Príncipe de los reyes de la tierra. Al que nos amó, y nos ha lavado de nuestros pecados con su sangre,