Moisés y Aarón están entre sus sacerdotes, y Samuel entre los que invocaron su Nombre; invocaban al SEÑOR, y él les respondía.
Levítico 8:29 - Biblia Spanish Sagradas Escrituras Y tomó Moisés el pecho, y lo meció, en ofrenda de mecedura delante del SEÑOR; del carnero de las consagraciones aquella fue la parte de Moisés; como el SEÑOR lo había mandado a Moisés. Dugang nga mga bersyonBiblia Reina Valera 1960 Y tomó Moisés el pecho, y lo meció, ofrenda mecida delante de Jehová; del carnero de las consagraciones, aquella fue la parte de Moisés, como Jehová lo había mandado a Moisés. Biblia Nueva Traducción Viviente Después Moisés tomó el pecho y lo levantó como una ofrenda especial al Señor. Esta era la porción que le pertenecía a Moisés del carnero de la ordenación, tal como el Señor le había ordenado. Biblia Católica (Latinoamericana) Moisés tomó entonces el pecho y lo meció como ofrenda mecida ante Yavé; esta porción del carnero de la consagración fue la parte de Moisés, como Yavé se lo había mandado. La Biblia Textual 3a Edicion Después tomó Moisés el pecho y lo meció como ofrenda mecida en presencia de YHVH. Es la porción de Moisés del carnero de la investidura, tal como YHVH había ordenado a Moisés. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Moisés tomó también el pecho y lo meció ante Yahveh. Era la porción del carnero de la investidura que le correspondía a Moisés, como lo había ordenado Yahveh a Moisés. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y Moisés tomó el pecho, y lo meció como ofrenda mecida delante de Jehová; del carnero de las consagraciones aquella fue la porción de Moisés; tal como Jehová lo había mandado a Moisés. |
Moisés y Aarón están entre sus sacerdotes, y Samuel entre los que invocaron su Nombre; invocaban al SEÑOR, y él les respondía.
Y traerán a todos vuestros hermanos de entre todas las naciones, por presente al SEÑOR, en caballos, en carros, en literas, y en mulos, y en camellos, a mi santo monte de Jerusalén, dice el SEÑOR de manera que los hijos de Israel traen el presente en vasos limpios a la Casa del SEÑOR.
Pues si coméis, o si bebéis, o hacéis otra cosa, hacedlo todo para la gloria de Dios.
Si alguno habla, hable conforme a las palabras de Dios; si alguno ministra, ministre conforme a la virtud que Dios suministra; para que en todas las cosas sea Dios glorificado por Jesús el Cristo, al cual es gloria e imperio para siempre jamás. Amén.