Online nga Bibliya

Mga paanunsiyo


Ang tibuok bibliya Daang Tugon Bag-ong Tugon




Levítico 13:36 - Biblia Spanish Sagradas Escrituras

entonces el sacerdote la mirará; y si la tiña hubiere cundido en la piel, no busque el sacerdote el pelo rubio, es inmundo.

Tan-awa ang kapitulo
Ipakita Interlinear Bible

Dugang nga mga bersyon

Biblia Reina Valera 1960

entonces el sacerdote la mirará; y si la tiña hubiere cundido en la piel, no busque el sacerdote el pelo amarillento; es inmundo.

Tan-awa ang kapitulo

Biblia Nueva Traducción Viviente

el sacerdote deberá examinarla de nuevo. Si encuentra que la llaga se ha extendido, no hace falta que el sacerdote busque el vello amarillo; la persona infectada quedará ceremonialmente impura.

Tan-awa ang kapitulo

Biblia Católica (Latinoamericana)

el sacerdote, al comprobar que la tiña se ha extendido, ya no tendrá que buscar pelo amarillento; aquella persona es impura.

Tan-awa ang kapitulo

La Biblia Textual 3a Edicion

entonces el sacerdote lo examinará, y si he aquí, la tiña se ha extendido en la piel, el sacerdote no tendrá que buscar el pelo amarillento: es impuro.

Tan-awa ang kapitulo

Biblia Serafín de Ausejo 1975

el sacerdote examinará al enfermo, y si efectivamente la tiña se ha extendido, no se detendrá en observar si el pelo se ha vuelto amarillento; es impuro.

Tan-awa ang kapitulo

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

entonces el sacerdote la mirará; y si la tiña se hubiere extendido en la piel, no busque el sacerdote el pelo amarillento, es inmundo.

Tan-awa ang kapitulo
Ubang mga hubad



Levítico 13:36
4 Cross References  

el sacerdote mirará la llaga; y si pareciere estar más profunda que la tez, y el pelo en ella fuera rubio y adelgazado, entonces el sacerdote lo dará por inmundo; es tiña, es lepra de la cabeza o de la barba.


Pero si la tiña se hubiere ido extendiendo en la piel después de su purificación,


Mas si le pareciere que la tiña está, y que ha salido en ella el pelo negro, la tiña está sanada; él está limpio, y por limpio lo dará el sacerdote.


Y al séptimo día volverá el sacerdote, y mirará; y si la plaga hubiere crecido en las paredes de la casa,