Morena soy, oh hijas de Jerusalén, mas codiciable; como las cabañas de Cedar, como las tiendas de Salomón.
Jueces 6:5 - Biblia Spanish Sagradas Escrituras Porque subían ellos y sus ganados, y venían con sus tiendas en grande multitud como langostas, que no había número en ellos ni en sus camellos; así venían a la tierra destruyéndola. Dugang nga mga bersyonBiblia Reina Valera 1960 Porque subían ellos y sus ganados, y venían con sus tiendas en grande multitud como langostas; ellos y sus camellos eran innumerables; así venían a la tierra para devastarla. Biblia Nueva Traducción Viviente Estas multitudes enemigas, que venían con sus animales y sus carpas, eran como una plaga de langostas; llegaban en numerosas manadas de camellos, imposibles de contar, y no se iban hasta que la tierra quedaba desolada. Biblia Católica (Latinoamericana) Sus rebaños y sus tiendas eran tan numerosos como las langostas; no se los podía contar ni a ellos ni a sus camellos cuando llegaban al país para arrasar con todo. La Biblia Textual 3a Edicion Porque subían con sus ganados y sus tiendas, entrando como langostas en multitud, pues tanto ellos como sus camellos eran innumerables, y entraban en la tierra para devastarla. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Porque ellos subían con sus ganados y sus tiendas; llegaban tan numerosos como langostas, pues ellos y sus camellos eran innumerables. Venían al país para devastarlo. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Porque subían ellos y sus ganados, y venían con sus tiendas en grande multitud como langostas, que no había número en ellos ni en sus camellos: así venían a la tierra para devastarla. |
Morena soy, oh hijas de Jerusalén, mas codiciable; como las cabañas de Cedar, como las tiendas de Salomón.
Nunca más será habitada, ni se morará en ella de generación en generación; ni hincará allí tienda el arabe, ni pastores tendrán allí majada;
Multitud de camellos te cubrirá, dromedarios de Madián y de Efa; vendrán todos los de Seba; traerán oro e incienso, y publicarán alabanzas del SEÑOR.
Cortaron su monte, dice el SEÑOR, porque no podrán ser contados; porque serán más que langostas, ni tendrán número.
Sus tiendas y sus ganados tomarán; sus cortinas, y todos sus vasos, y sus camellos, tomarán para sí; y llamarán contra ellos miedo alrededor.
Y serán sus camellos por presa, y la multitud de sus ganados por despojo; y los esparciré por todos los vientos, echados hasta el postrer rincón; y de todos sus lados les traeré su ruina, dijo el SEÑOR.
El SEÑOR de los ejércitos juró por su vida, diciendo : Yo te llenaré de hombres como de langostas, y cantarán sobre ti canción de lagareros .
El fruto de tu tierra y todo tu trabajo comerá pueblo que no conociste; y solamente serás oprimido y quebrantado todos los días.
Y Madián, y Amalec, y todos los orientales, estaban tendidos en el valle como langostas en muchedumbre, y sus camellos eran innumerables, como la arena que está a la ribera del mar en multitud.
Y Zeba y Zalmuna estaban en Carcor, y con ellos su ejército como de quince mil hombres , todos los que habían quedado de todo el ejército de los orientales; y los muertos habían sido ciento veinte mil hombres que sacaban espada.
Entonces dijeron Zeba y Zalmuna: Levántate tú, y mátanos; porque como es el varón, tal es su valentía. Y Gedeón se levantó, y mató a Zeba y a Zalmuna; y tomó las planchas que sus camellos traían al cuello.
Y los hirió David desde aquella madrugada hasta la tarde del día; y no escapó de ellos ninguno, sino cuatrocientos jóvenes, que habían subido en camellos y huyeron.