Y les mandó diciendo: Así diréis a mí señor Esaú: Así dice tu siervo Jacob: Con Labán he morado, y me he detenido hasta ahora;
Jueces 5:4 - Biblia Spanish Sagradas Escrituras Cuando saliste de Seir, oh SEÑOR, cuando te apartaste del campo de Edom, la tierra tembló, y los cielos destilaron, y las nubes gotearon aguas. Dugang nga mga bersyonBiblia Reina Valera 1960 Cuando saliste de Seir, oh Jehová, Cuando te marchaste de los campos de Edom, La tierra tembló, y los cielos destilaron, Y las nubes gotearon aguas. Biblia Nueva Traducción Viviente »Señor, cuando saliste de Seir y marchaste por los campos de Edom, la tierra tembló, y los cielos nublados derramaron lluvias torrenciales. Biblia Católica (Latinoamericana) ¡Oh Yavé! Cuando saliste de Seir, atravesando los campos de Edom, tembló la tierra, los cielos se deshicieron, las nubes se convirtieron en agua. La Biblia Textual 3a Edicion Cuando saliste de Seír, oh YHVH, Cuando avanzaste desde el campo de Edom, La tierra se estremeció, los cielos destilaron, Y las nubes gotearon agua. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Cuando tú, Yahveh, salías de Seír cuando avanzabas por los campos de Edom, se estremeció la tierra, gotearon los cielos y las nubes destilaron agua. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Jehová, cuando saliste de Seir, cuando te apartaste del campo de Edom, la tierra tembló, y los cielos destilaron, y las nubes gotearon aguas. |
Y les mandó diciendo: Así diréis a mí señor Esaú: Así dice tu siervo Jacob: Con Labán he morado, y me he detenido hasta ahora;
La tierra se removió, y tembló; los fundamentos de los cielos fueron movidos, y se quebrantaron, porque él se airó.
Abundante lluvia esparciste, oh Dios, a tu heredad; y cuando se cansó, tú la recreaste.
Las nubes echaron inundaciones de aguas; tronaron los cielos, y discurrieron tus rayos.
Anduvo en derredor el sonido de tus truenos; los relámpagos alumbraron el mundo; la tierra se estremeció y tembló.
Hemos sido como aquellos de quienes nunca te enseñoreaste, sobre los cuales nunca fue llamado tu nombre.
Y debajo de él se derretirán los montes, y los valles se hendirán como la cera delante del fuego, como las aguas que corren cuesta abajo.
Y dijo: el SEÑOR vino de Sinaí, y de Seir les esclareció; resplandeció del monte de Parán, y vino con diez mil santos; a su diestra la ley de fuego para ellos.
La voz del cual entonces conmovió la tierra; mas ahora ha denunciado, diciendo: Aún una vez, y yo conmoveré no solamente la tierra, sino también el cielo.