Y se levantaron todos sus hijos y todas sus hijas para consolarlo; mas él no quiso tomar consolación, y dijo: Porque yo tengo de descender a mi hijo enlutado hasta la sepultura. Y lo lloró su padre.
Juan 11:31 - Biblia Spanish Sagradas Escrituras Entonces los judíos que estaban en casa con ella, y la consolaban, como vieron que María se había levantado prestamente, y había salido, la siguieron, diciendo: Va al sepulcro a llorar allí. Dugang nga mga bersyonBiblia Reina Valera 1960 Entonces los judíos que estaban en casa con ella y la consolaban, cuando vieron que María se había levantado de prisa y había salido, la siguieron, diciendo: Va al sepulcro a llorar allí. Biblia Nueva Traducción Viviente Cuando la gente que estaba en la casa consolando a María la vio salir con tanta prisa, creyeron que iba a la tumba de Lázaro a llorar. Así que la siguieron. Biblia Católica (Latinoamericana) Los judíos que estaban con María en la casa consolándola, al ver que se levantaba aprisa y salía, pensaron que iba a llorar al sepulcro y la siguieron. La Biblia Textual 3a Edicion Entonces los judíos que estaban en la casa con ella y la consolaban, viendo que Miriam se levantó de prisa y salió, la siguieron, pensando° que iba al sepulcro a llorar allí. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Cuando los judíos que estaban en la casa con María dándole el pésame vieron que se levantaba tan precipitadamente y salía fuera la siguieron, pensando que iba al sepulcro para llorar allí. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Entonces los judíos que estaban en casa con ella y la consolaban, cuando vieron que María se levantó aprisa y salió, la siguieron, diciendo: Va al sepulcro a llorar allí. |
Y se levantaron todos sus hijos y todas sus hijas para consolarlo; mas él no quiso tomar consolación, y dijo: Porque yo tengo de descender a mi hijo enlutado hasta la sepultura. Y lo lloró su padre.
y muchos de los judíos habían venido a Marta y a María, a consolarlas de su hermano.
Jesús entonces, como la vio llorando, y a los judíos que habían venido juntamente con ella llorando, se embraveció en Espíritu, se alborotó a sí mismo,
Pero el espiritual discierne todas las cosas; mas él de nadie es discernido.