Y respondió Abram a Sarai: He ahí tu sierva en tu mano, haz con ella lo que bien te pareciere. Entonces Sarai la afligió, y ella huyó de su presencia.
Josué 9:25 - Biblia Spanish Sagradas Escrituras Ahora pues, henos aquí en tu mano; lo que te pareciere bueno y recto hacer de nosotros, hazlo. Dugang nga mga bersyonBiblia Reina Valera 1960 Ahora, pues, henos aquí en tu mano; lo que te pareciere bueno y recto hacer de nosotros, hazlo. Biblia Nueva Traducción Viviente Ahora estamos a merced de ustedes; hagan con nosotros lo que mejor les parezca. Biblia Católica (Latinoamericana) Ahora estamos en tus manos, trátanos como te parezca bueno y justo'. La Biblia Textual 3a Edicion Ahora pues, henos en tu mano. Haz con nosotros como te parezca bien y justo. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Ahora, pues, aquí estamos, en tus manos; haz con nosotros como te parezca mejor y más recto'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Ahora pues, aquí estamos en tu mano; lo que te pareciere bueno y recto hacer de nosotros, hazlo. |
Y respondió Abram a Sarai: He ahí tu sierva en tu mano, haz con ella lo que bien te pareciere. Entonces Sarai la afligió, y ella huyó de su presencia.
Y si dijere: No me agradas; aquí estoy, haga de mí lo que bien le pareciere.
Entonces David dijo a Gad: En grande angustia estoy; ruego que yo caiga en la mano del SEÑOR, porque sus miseraciones son muchas, y que no caiga yo en manos de hombres.
Y el mayordomo, y el presidente de la ciudad, y los ancianos, y los ayos, enviaron a decir a Jehú: Siervos tuyos somos, y haremos todo lo que nos mandares; no elegiremos por rey a ninguno; mas tú harás lo que bien te pareciere.
Me enojé contra mi pueblo, profané mi heredad, y los entregué en tu mano; no les hiciste misericordias; sobre el viejo agravaste mucho tu yugo.
En lo que a mí toca, he aquí estoy en vuestras manos; haced de mí como mejor y más recto os pareciere.
Y dijo el rey Sedequías: Helo ahí, en vuestras manos está; que el rey no podrá contra vosotros nada.
Y él lo hizo así; que los libró de la mano de los hijos de Israel, para que no los matasen.
Y los hijos de Israel respondieron al SEÑOR: Hemos pecado; haz tú con nosotros como bien te pareciere; solamente que ahora nos libres en este día.
Y entrando a los de Sucot, dijo: He aquí a Zeba y a Zalmuna, sobre los cuales me zaheristeis, diciendo: ¿Está ya la mano de Zeba y de Zalmuna en tu mano, para que demos nosotros pan a tus varones cansados?
Y Samuel se lo manifestó todo, sin encubrirle nada. Entonces él dijo: El SEÑOR es; haga lo que bien le pareciere.