Embotaste asimismo el filo de su espada, y no lo levantaste en la batalla.
Josué 7:4 - Biblia Spanish Sagradas Escrituras Y subieron allá del pueblo como tres mil hombres, los cuales huyeron delante de los de Hai. Dugang nga mga bersyonBiblia Reina Valera 1960 Y subieron allá del pueblo como tres mil hombres, los cuales huyeron delante de los de Hai. Biblia Nueva Traducción Viviente Así que enviaron a unos tres mil guerreros, pero fueron completamente derrotados. Los hombres de Hai Biblia Católica (Latinoamericana) Subieron más o menos tres mil hombres del pueblo, pero los habitantes de Aí los rechazaron. La Biblia Textual 3a Edicion De manera que del pueblo subieron allí como tres mil hombres, pero huyeron ante los hombres de Hai. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Subieron, pues, unos tres mil hombres del ejército, pero tuvieron que emprender la fuga ante los de Ay. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y subieron allá del pueblo como tres mil hombres, los cuales huyeron delante de los de Hai. |
Embotaste asimismo el filo de su espada, y no lo levantaste en la batalla.
Un millar huirá a la amenaza de uno; a la amenaza de cinco huiréis vosotros todos ; hasta que quedéis como mástil en la cumbre del monte; y como bandera sobre algún cabezo.
pero vuestras iniquidades han hecho división entre vosotros y vuestro Dios, y vuestros pecados han hecho cubrir su rostro de vosotros, para no oiros.
Y pondré mi ira sobre vosotros, y seréis heridos delante de vuestros enemigos; y los que os aborrecen se enseñorearán de vosotros, y huiréis sin que haya quien os persiga.
El SEÑOR te entregará herido delante de tus enemigos; por un camino saldrás a ellos, y por siete caminos huirás delante de ellos; y serás por estremecimiento a todos los reinos de la tierra.
¿Cómo podría perseguir uno a mil, y dos harían huir a diez mil, si su Fuerte no los hubiese vendido, y el SEÑOR no los hubiera entregado?
Y volviendo a Josué, le dijeron: No suba todo el pueblo, mas suban como dos mil o como tres mil hombres, y tomarán a Hai; no fatigues a todo el pueblo yendo allí, porque son pocos.