Entonces salió Lot, y habló a sus yernos, los que habían de tomar sus hijas, y les dijo: Levantaos, salid de este lugar; porque el SEÑOR va a destruir esta ciudad. Mas fue tenido como burlador en ojos de sus yernos.
Jeremías 43:2 - Biblia Spanish Sagradas Escrituras dijo Azarías hijo de Osaías, y Johanán hijo de Carea, y todos los varones soberbios dijeron a Jeremías: Mentira dices; no te envió el SEÑOR nuestro Dios para decir: No entréis en Egipto a peregrinar allí. Dugang nga mga bersyonBiblia Reina Valera 1960 dijo Azarías hijo de Osaías y Johanán hijo de Carea, y todos los varones soberbios dijeron a Jeremías: Mentira dices; no te ha enviado Jehová nuestro Dios para decir: No vayáis a Egipto para morar allí, Biblia Nueva Traducción Viviente Azarías, hijo de Osaías, y Johanán, hijo de Carea, y los demás hombres arrogantes le dijeron a Jeremías: «¡Mentira! ¡El Señor nuestro Dios no nos ha prohibido ir a Egipto! Biblia Católica (Latinoamericana) Azarías, hijo de Masías, y Joanán, hijo de Carea, y todos esos hombres, insolentes y porfiados, le contestaron a Jeremías: 'No es cierto lo que cuentas. No es Yavé quien te ha encargado decirnos: 'No se vayan a vivir a Egipto', La Biblia Textual 3a Edicion Azarías ben Osaías y Johanán ben Carea, y todos los varones arrogantes respondieron a Jeremías: ¡Mentira dices! No te ha enviado YHVH nuestro Dios para decir: No vayáis a Egipto para peregrinar allí, Biblia Serafín de Ausejo 1975 Azarías, hijo de Hosaías, Juan, hijo de Caréaj, y todos los hombres insolentes y rebeldes dijeron a Jeremías: 'Estás diciendo una mentira. Yahveh, nuestro Dios, no te ha enviado a decir: 'No vayáis a Egipto para residir allí', Biblia Reina Valera Gómez (2023) dijo Azarías, hijo de Osaías, y Johanán, hijo de Carea, y todos los hombres soberbios dijeron a Jeremías: Mentira dices; no te ha enviado Jehová nuestro Dios para decir: No entréis en Egipto a peregrinar allí; |
Entonces salió Lot, y habló a sus yernos, los que habían de tomar sus hijas, y les dijo: Levantaos, salid de este lugar; porque el SEÑOR va a destruir esta ciudad. Mas fue tenido como burlador en ojos de sus yernos.
Se Rebeló asimismo contra Nabucodonosor, al cual había jurado por Dios; y endureció su cerviz, y obstinó su corazón, para no volverse al SEÑOR Dios de Israel.
Reprendiste a los soberbios, malditos los que yerran de tus mandamientos.
Tale el SEÑOR todos los labios lisonjeros; la lengua que habla grandezas,
Muy hastiada está nuestra alma del escarnio de los que están en holgura; del menosprecio de los soberbios.
Y el Faraón respondió: ¿Quién es el SEÑOR, para que yo oiga su voz y deje ir a Israel? Yo no conozco al SEÑOR, ni tampoco dejaré ir a Israel.
Abominación es al SEÑOR todo altivo de corazón; el pacto que él haga , no será sin castigo.
para que no me sacie, y te niegue, y diga, ¿Quién es el SEÑOR? O no sea que siendo pobre, hurte, y blasfeme el nombre de mi Dios.
Los ojos altivos, la lengua mentirosa, las manos derramadoras de sangre inocente,
El temor del SEÑOR es aborrecer el mal; la soberbia, la arrogancia, el mal camino, y la boca perversa, aborrezco.
Entretanto la cabeza de Efraín será Samaria, y la cabeza de Samaria el hijo de Remalías. Si vosotros no creyereis, de cierto no permaneceréis.
Y dijeron: Venid, y tracemos maquinaciones contra Jeremías; porque la ley no faltará del sacerdote, ni el consejo del sabio, ni la palabra del profeta. Venid e hirámoslo de lengua, y no miremos a todas sus palabras.
y vinieron luego a Gedalías en Mizpa, Ismael hijo de Netanías, y Johanán y Jonatán hijos de Carea, y Seraías hijo de Tanhumet, y los hijos de Efai netofatita, y Jezanías hijo de Maacati, ellos y su hombres.
Y Johanán, hijo de Carea, y todos los príncipes de los ejércitos que con él estaban , tomaron a todo el resto del pueblo que habían tornado de Ismael, hijo de Netanías, de Mizpa, después que hirió a Gedalías, hijo de Ahicam; hombres de guerra, mujeres, niños, y los eunucos que Johanán había hecho tornar de Gabaón;
por causa de los caldeos; porque temían de ellos, por haber herido Ismael, hijo de Netanías, a Gedalías, hijo de Ahicam, al cual el rey de Babilonia había puesto sobre la tierra.
Vinieron todos los príncipes de los ejércitos, y Johanán, hijo de Carea, y Jezanías, hijo de Osaías, y todo el pueblo desde el menor hasta el mayor,
¿Por qué hicisteis errar vuestras almas? Porque vosotros me enviasteis al SEÑOR vuestro Dios, diciendo: Ora por nosotros al SEÑOR nuestro Dios; y conforme a todas las cosas que el SEÑOR nuestro Dios dijere, háznoslo saber así, y lo pondremos por obra.
Y ellos dijeron a Jeremías: El SEÑOR sea entre nosotros testigo de la verdad y de la lealtad, si no hiciéremos conforme a todo aquello para lo cual el SEÑOR tu Dios te enviare a nosotros.
Y aconteció que cuando Jeremías acabó de hablar a todo el pueblo todas las palabras del SEÑOR Dios de ellos, todas estas palabras por las cuales el SEÑOR Dios de ellos le había enviado a ellos mismos,
La palabra que nos has hablado en nombre del SEÑOR, no oímos de ti;
Mas él da mayor gracia. Por esto él dice: Dios resiste a los soberbios, y da la gracia a los humildes.
Igualmente, jóvenes, sed sujetos a los ancianos de tal manera que seáis todos sujetos unos a otros. Vestíos de humildad de ánimo, porque Dios resiste a los soberbios, y da gracia a los humildes.