que despierta la palabra de su siervo, y que cumple el consejo de sus mensajeros; que digo a Jerusalén: Serás habitada; y a las ciudades de Judá: Serán reedificadas, y sus ruinas levantaré;
Jeremías 28:9 - Biblia Spanish Sagradas Escrituras El profeta que profetizó de paz, cuando sobreviniere la palabra del profeta, será conocido como el profeta que el SEÑOR en verdad envió. Dugang nga mga bersyonBiblia Reina Valera 1960 El profeta que profetiza de paz, cuando se cumpla la palabra del profeta, será conocido como el profeta que Jehová en verdad envió. Biblia Nueva Traducción Viviente Así que el profeta que predice paz debe demostrar que está en lo correcto. Solamente cuando sus predicciones se cumplan podremos saber que el Señor lo ha enviado». Biblia Católica (Latinoamericana) Por eso, un profeta que anuncia la paz no será reconocido como verdadero profeta, mandado por Yavé, mientras no se realice lo que él anunció. La Biblia Textual 3a Edicion Respecto al profeta que profetiza paz, cuando se cumpla la palabra de tal profeta, será reconocido como uno que en verdad ha enviado YHVH. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Respecto al profeta que profetiza bienestar, cuando se cumpla la palabra de ese profeta, se conocerá que a ese profeta lo ha enviado realmente Yahveh'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) El profeta que profetizó de paz, cuando se cumpla la palabra del profeta, entonces será conocido el profeta que Jehová en verdad lo envió. |
que despierta la palabra de su siervo, y que cumple el consejo de sus mensajeros; que digo a Jerusalén: Serás habitada; y a las ciudades de Judá: Serán reedificadas, y sus ruinas levantaré;
Y yo dije: ¡Ah! ¡ah! ¡Señor DIOS! He aquí que los profetas les dicen: No veréis cuchillo, ni habrá hambre en vosotros, sino que en este lugar os daré paz verdadera.
(Y dije: ¡Ay, ay, el SEÑOR Dios! Verdaderamente en gran manera has engañado a este pueblo y a Jerusalén, diciendo: Paz tendréis; pues que el cuchillo ha venido hasta el alma.)
Y curan el quebrantamiento de la hija de mi pueblo con liviandad, diciendo: Paz, paz; y no hay paz.
Y curaron el quebrantamiento de la hija de mi pueblo con liviandad, diciendo: Paz, paz; y no hay paz.
Pero cuando ello viniere (he aquí viene), sabrán que hubo profeta entre ellos.
Y si dijeres en tu corazón: ¿Cómo conoceremos la palabra que el SEÑOR no hubiere hablado?
Cuando el profeta hablare en nombre del SEÑOR, y no fuere la tal cosa, ni viniere, es palabra que el SEÑOR no ha hablado; con soberbia la habló el tal profeta; no tengas temor de él.