Y pasaron muchos días, y murió la hija de Súa, mujer de Judá; y Judá se consoló, y subía a los trasquiladores de sus ovejas a Timnat, él y su amigo Hira el adulamita.
Génesis 38:1 - Biblia Spanish Sagradas Escrituras Y aconteció en aquel tiempo, que Judá descendió con sus hermanos, y se fue a un varón adulamita, que se llamaba Hira. Dugang nga mga bersyonBiblia Reina Valera 1960 Aconteció en aquel tiempo, que Judá se apartó de sus hermanos, y se fue a un varón adulamita que se llamaba Hira. Biblia Nueva Traducción Viviente En esos días, Judá dejó su casa y se fue a Adulam, donde se quedó con un hombre llamado Hira. Biblia Católica (Latinoamericana) Por aquel tiempo Judá se separó de sus hermanos y bajó donde un tal Jirá, que era de Adulam. La Biblia Textual 3a Edicion Había ya acontecido en este tiempo, que separándose Judá de sus hermanos, se relacionó° con un adulamita° cuyo nombre era Hira. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Por aquel tiempo Judá bajó de donde estaban sus hermanos y se dirigió a la casa de un hombre de Adulán, llamado Jirá. Judá vio allí a la hija de un cananeo llamado Súa, la tomó por mujer y se unió a ella. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y aconteció en aquel tiempo, que Judá descendió de donde estaban sus hermanos, y se fue a un varón adulamita, que se llamaba Hira. |
Y pasaron muchos días, y murió la hija de Súa, mujer de Judá; y Judá se consoló, y subía a los trasquiladores de sus ovejas a Timnat, él y su amigo Hira el adulamita.
Y Judá envió el cabrito de las cabras por mano de su amigo el adulamita, para que tomase la prenda de mano de la mujer; mas no la halló.
Estos tres que eran de los treinta principales descendieron y vinieron en tiempo de la siega a David a la cueva de Adulam; y el campamento de los filisteos estaba en el valle de Refaim.
Y aconteció también que un día pasaba Eliseo por Sunem; y había allí una mujer principal, la cual le constriñó a que comiese del pan; y así cuando pasaba por allí, venía a su casa a comer del pan.
El que anda con los sabios, sabio será; mas el que se allega a los locos, será destruido.
Dejad las simplezas, y vivid; y andad por el camino de la inteligencia.
Aun te traeré heredero, oh moradora de Maresa; la gloria de Israel vendrá hasta Adulam.
Y saliendo Jael a recibir a Sísara, le dijo: Ven, señor mío, ven a mí, no tengas temor. Y él vino a ella a la tienda, y ella le cubrió con una manta.
Y yéndose David de allí se escapó a la cueva de Adulam (justicia o rectitud del pueblo ); lo cual cuando oyeron sus hermanos y toda la casa de su padre, vinieron allí a él.