¿Qué es el hombre, para que lo engrandezcas, y que pongas sobre él tu corazón,
Éxodo 7:23 - Biblia Spanish Sagradas Escrituras Y tornando el Faraón se volvió a su casa, y aun con esto no se convirtió. Dugang nga mga bersyonBiblia Reina Valera 1960 Y Faraón se volvió y fue a su casa, y no dio atención tampoco a esto. Biblia Nueva Traducción Viviente El faraón regresó a su palacio y no le prestó más atención al asunto. Biblia Católica (Latinoamericana) Faraón volvió a su casa como si no hubiera ocurrido nada importante. La Biblia Textual 3a Edicion Regresó Faraón y fue a su casa, y tampoco prestó atención° a eso. Biblia Serafín de Ausejo 1975 El Faraón se volvió y entró en su casa, sin prestar atención tampoco a esto. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y tornando Faraón se volvió a su casa, y no puso su corazón tampoco en esto. |
¿Qué es el hombre, para que lo engrandezcas, y que pongas sobre él tu corazón,
No confiéis en la violencia, ni en la rapiña no os envanezcáis; si se aumentare la hacienda, no pongáis el corazón en ella .
Y los encantadores de Egipto hicieron lo mismo con sus encantamientos; y el corazón del Faraón se endureció, y no los escuchó; como el SEÑOR lo había dicho.
Y en todo Egipto hicieron pozos alrededor del río para beber, porque no podían beber de las aguas del río.
De los siervos del Faraón, el que temió la palabra del SEÑOR, hizo huir sus siervos y su ganado a casa;
mas el que no puso en su corazón la palabra del SEÑOR, dejó sus siervos y sus ganados en el campo.
Inclina tu oído, y oye las palabras de los sabios, y pon tu corazón a mi sabiduría;
Bienaventurado el hombre que siempre teme a Dios ; mas el que endurece su corazón, caerá en mal.
El hombre que reprendido endurece la cerviz, de repente será quebrantado; y no habrá para él medicina.
SEÑOR, cuando se levante tu mano, no verán; verán al cabo, y se avergonzarán con celo del pueblo. Y a tus enemigos fuego los consumirá.
Y dijiste: Para siempre seré señora. Hasta ahora no has pensado en esto, ni te acordaste de tu postrimería.
Y no tuvieron temor, ni rasgaron sus vestidos, el rey y todos sus siervos que oyeron todas estas palabras.
Oh SEÑOR, ¿Por ventura no miran tus ojos a la verdad? Los azotaste, y no les dolió; los consumiste, y no quisieron recibir castigo; endurecieron sus rostros más que la piedra, no quisieron tornarse.
Y me habló aquel varón, diciendo: Hijo de hombre, mira con tus ojos, y oye con tus oídos, y pon tu corazón a todas las cosas que te muestro; porque para que yo te las mostrase eres traído aquí. Cuenta todo lo que ves a la Casa de Israel.
Mirad entre los gentiles, y ved, y maravillaos pasmosamente; porque obra será hecha en vuestros días, que aun cuando se os contare, no la creeréis.
Si no oyereis, y si no acordareis dar gloria a mi Nombre, dijo el SEÑOR de los ejércitos, enviaré maldición sobre vosotros, y maldeciré vuestras bendiciones; y aun las he maldecido, porque no lo ponéis en vuestro corazón.
y les dijo: Poned vuestro corazón a todas las palabras que yo protesto hoy contra vosotros, para que las mandéis a vuestros hijos, y guarden y cumplan todas las palabras de esta ley.
Y al tiempo que se moría, le decían las que estaban junto a ella: No tengas temor, porque has dado a luz un hijo. Mas ella no respondió, ni paró atención.