Y dijo Moisés: Esto es lo que el SEÑOR ha mandado: Llenarás un gomer de él para que se guarde para vuestros descendientes, a fin de que vean el pan que yo os di a comer en el desierto, cuando yo os saqué de la tierra de Egipto.
Éxodo 16:33 - Biblia Spanish Sagradas Escrituras Y dijo Moisés a Aarón: Toma un vaso y pon en él un gomer lleno de maná, y ponlo delante del SEÑOR, para que sea guardado para vuestros descendientes. Dugang nga mga bersyonBiblia Reina Valera 1960 Y dijo Moisés a Aarón: Toma una vasija y pon en ella un gomer de maná, y ponlo delante de Jehová, para que sea guardado para vuestros descendientes. Biblia Nueva Traducción Viviente Entonces Moisés le dijo a Aarón: «Toma una vasija y llénala con dos litros de maná. Después colócala en un lugar sagrado, delante del Señor, a fin de conservarlo para todas las generaciones futuras». Biblia Católica (Latinoamericana) Moisés dijo a Aarón: 'Toma un tiesto y échale una medida de maná; la depositarás ante la presencia de Yavé y la conservarás para los descendientes de ustedes. La Biblia Textual 3a Edicion Y dijo Moisés a Aarón: Toma una vasija y pon en ella un homer lleno de maná°, y ponlo delante de YHVH, a fin de conservarlo por vuestras generaciones. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Dijo después Moisés a Aarón: 'Toma una vasija, mete en ella un ómer lleno de maná y ponla delante de Yahveh, a fin de conservarlo para vuestros descendientes'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y dijo Moisés a Aarón: Toma un vaso y pon en él un gomer lleno de maná, y ponlo delante de Jehová, para que sea guardado para vuestros descendientes. |
Y dijo Moisés: Esto es lo que el SEÑOR ha mandado: Llenarás un gomer de él para que se guarde para vuestros descendientes, a fin de que vean el pan que yo os di a comer en el desierto, cuando yo os saqué de la tierra de Egipto.
que tenía un incensario de oro, y el Arca del Pacto cubierta por todas partes de oro; en donde estaba una urna de oro que contenía el maná, y la vara de Aarón que reverdeció, y las Tablas del Testamento.
El que tiene oído, oiga lo que el Espíritu dice a las Iglesias. Al que venciere, daré a comer del Maná escondido, y le daré una piedrecita blanca, y en la piedrecita un Nombre nuevo escrito, el cual ninguno conoce sino aquel que lo recibe.