Y agradó esta palabra en ojos del rey y de los príncipes, e hizo el rey conforme al dicho de Memucán;
Ester 1:20 - Biblia Spanish Sagradas Escrituras Y el hecho que hará el rey será oído en todo su reino, aunque es grande, y todas las mujeres darán honra a sus maridos, desde el mayor hasta el menor. Dugang nga mga bersyonBiblia Reina Valera 1960 Y el decreto que dicte el rey será oído en todo su reino, aunque es grande, y todas las mujeres darán honra a sus maridos, desde el mayor hasta el menor. Biblia Nueva Traducción Viviente ¡Cuando se publique este decreto en todo el vasto imperio del rey, los maridos de todas partes, sea cual fuere su rango, recibirán el respeto que merecen de parte de sus esposas! Biblia Católica (Latinoamericana) La ordenanza que mande publicar el rey se dará a conocer a todos en su reino, para que todas las mujeres respeten a sus maridos, desde el más grande hasta el más pequeño». La Biblia Textual 3a Edicion Y así, cuando el edicto del rey, el que va a hacer, sea oído en todo su reino ¡que siempre sea grande!° todas las mujeres darán honra a sus maridos, desde el más importante hasta el más humilde.° Biblia Serafín de Ausejo 1975 El edicto que el rey dé será conocido en todo su reino, aunque es inmenso; y así, todas las mujeres honrarán a sus maridos, desde el mayor hasta el menor'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y el mandamiento que hará el rey será oído en todo su reino, aunque es grande, y todas las esposas darán honra a sus maridos, desde el mayor hasta el menor. |
Y agradó esta palabra en ojos del rey y de los príncipes, e hizo el rey conforme al dicho de Memucán;
Pasadas estas cosas, reposada ya la ira del rey Asuero, se acordó de Vasti, y de lo que hizo, y de lo que fue sentenciado sobre ella.
Así también haga cada uno de vosotros, cada uno ame a su mujer como a sí mismo; y la mujer que tenga en reverencia a su marido.
Entonces todos los hombres de su ciudad lo apedrearán con piedras, y morirá; así quitarás el mal de tu tierra; y todo Israel oirá, y temerá.
Casadas, estad sujetas a vuestros propios maridos, como conviene en el Señor.