Y les dijeron: No metáis acá la cautividad; porque el pecado contra el SEÑOR será sobre nosotros. Vosotros tratáis de añadir sobre nuestros pecados y sobre nuestras culpas, siendo asaz grande nuestro delito, y la ira del furor sobre Israel.
Esdras 10:10 - Biblia Spanish Sagradas Escrituras Y se levantó Esdras el sacerdote, y les dijo: Vosotros habéis prevaricado, por cuanto tomásteis mujeres extrañas, añadiendo así sobre el pecado de Israel. Dugang nga mga bersyonBiblia Reina Valera 1960 Y se levantó el sacerdote Esdras y les dijo: Vosotros habéis pecado, por cuanto tomasteis mujeres extranjeras, añadiendo así sobre el pecado de Israel. Biblia Nueva Traducción Viviente Entonces Esdras, el sacerdote, se puso de pie y les dijo: —Ustedes han cometido un pecado terrible; al casarse con mujeres paganas, han aumentado la culpa de Israel. Biblia Católica (Latinoamericana) Entonces se levantó el sacerdote Esdras y les dijo: 'Ustedes han sido infieles, se han casado con mujeres extranjeras y han aumentado así la culpa de Israel. La Biblia Textual 3a Edicion Y el sacerdote Esdras se levantó y les dijo: Vosotros habéis sido infieles cohabitando con mujeres extranjeras, aumentando la culpabilidad de Israel. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Entonces se levantó el sacerdote Esdras y les dijo: 'Vosotros habéis prevaricado al tomar por esposas a mujeres extranjeras, aumentando de este modo los pecados de Israel. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y se levantó Esdras el sacerdote, y les dijo: Vosotros habéis prevaricado, por cuanto tomasteis esposas extranjeras, añadiendo así sobre el pecado de Israel. |
Y les dijeron: No metáis acá la cautividad; porque el pecado contra el SEÑOR será sobre nosotros. Vosotros tratáis de añadir sobre nuestros pecados y sobre nuestras culpas, siendo asaz grande nuestro delito, y la ira del furor sobre Israel.
Ahora pues, dad confesión al SEÑOR Dios de vuestros padres, y haced su voluntad, y apartaos de los pueblos de las tierras, y de las mujeres extranjeras.
Así fueron reunidos todos los varones de Judá y de Benjamín en Jerusalén dentro de tres días, a los veinte del mes, el cual era el mes noveno; y se sentó todo el pueblo en la plaza de la Casa de Dios, temblando con motivo de aquel negocio, y a causa de las lluvias.
¿hemos de volver a disipar tus mandamientos, y a emparentar con los pueblos de estas abominaciones? ¿No te ensañarías contra nosotros hasta consumirnos, sin que quedara resto ni escapadura?
y dije: Dios mío, confuso y avergonzado estoy para levantar, oh Dios mío, mi rostro a ti; porque nuestras iniquidades se han multiplicado sobre nuestra cabeza, y nuestros delitos han crecido hasta el cielo.
Y he aquí, vosotros habéis levantado en lugar de vuestros padres, prole de hombres pecadores, para añadir aún a la ira del SEÑOR contra Israel.