En aquel tiempo se dirá a Jerusalén: No temas; Sion, no se debiliten tus manos.
Efesios 3:13 - Biblia Spanish Sagradas Escrituras Por tanto, pido que no desmayéis por causa de mis tribulaciones por vosotros, lo cual es vuestra gloria. Dugang nga mga bersyonBiblia Reina Valera 1960 por lo cual pido que no desmayéis a causa de mis tribulaciones por vosotros, las cuales son vuestra gloria. Biblia Nueva Traducción Viviente Por eso les ruego que no se desanimen a causa de mis pruebas en este lugar. Mi sufrimiento es por ustedes, así que deberían sentirse honrados. Biblia Católica (Latinoamericana) Por eso, yo les ruego que no se desanimen al ver las pruebas que soporto por ustedes. Más bien han de sentirse orgullosos de ellas. La Biblia Textual 3a Edicion Por tanto, pido que no desmayéis a causa de mis tribulaciones por vosotros, que son° vuestra gloria. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Así que os ruego que no perdáis el ánimo a causa de mis tribulaciones por vosotros; que éstas son vuestra gloria. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Por lo cual pido que no desmayéis a causa de mis tribulaciones por vosotros, las cuales son vuestra gloria. |
En aquel tiempo se dirá a Jerusalén: No temas; Sion, no se debiliten tus manos.
confirmando los ánimos de los discípulos, exhortándoles a que permaneciesen en la fe, y enseñándoles que es necesario que por muchas tribulaciones entremos en el Reino de Dios.
Pero si somos atribulados, es por vuestra consolación y salud; la cual es obrada en el sufrir las mismas aflicciones que nosotros también padecemos; o si somos consolados, es por vuestra consolación y salud;
Por lo cual teniendo nosotros este ministerio según la misericordia que hemos alcanzado, no faltamos;
No nos faltemos, pues, de hacer bien; que a su tiempo segaremos, si no hubiéremos faltado.
Por causa de esto yo Pablo, prisionero, del Cristo Jesús para vosotros los gentiles,
y les dirá: Oye, Israel, vosotros os juntáis hoy en batalla contra vuestros enemigos; no se ablande vuestro corazón, no temáis, ni tengáis miedo, ni tampoco os desalentéis delante de ellos;
Que ahora me gozo en lo que padezco por vosotros, y cumplo en mi carne lo que falta de las tribulaciones del Cristo por su cuerpo, que es la Iglesia;