Si mis pasos se apartaron del camino, y si mi corazón se fue tras mis ojos, y si algo se apegó a mis manos,
Eclesiastés 6:9 - Biblia Spanish Sagradas Escrituras Más vale gozar del bien presente que el deseo errante. Y también esto es vanidad y aflicción de espíritu. Dugang nga mga bersyonBiblia Reina Valera 1960 Más vale vista de ojos que deseo que pasa. Y también esto es vanidad y aflicción de espíritu. Biblia Nueva Traducción Viviente Disfruta de lo que tienes en lugar de desear lo que no tienes; soñar con tener cada vez más no tiene sentido, es como perseguir el viento. Biblia Católica (Latinoamericana) Más vale creer en lo que se ve que dejarse llevar por sus deseos: pues allí también no se retiene nada y se corre tras el viento. La Biblia Textual 3a Edicion Más vale lo que ven los ojos que el divagar del alma.° También esto es vanidad y correr tras el viento. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Más vale ser realista que perderse en cavilaciones. También eso es vanidad y atrapar viento. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Más vale vista de ojos que deseo que pasa. Y también esto es vanidad y aflicción de espíritu. |
Si mis pasos se apartaron del camino, y si mi corazón se fue tras mis ojos, y si algo se apegó a mis manos,
Yo miré todas las obras que se hacen debajo del sol; y he aquí, todo ello es vanidad y aflicción de espíritu.
Y di mi corazón a conocer la sabiduría, y la ciencia; y las locuras y los desvaríos conocí al fin que aun esto era aflicción de espíritu.
Vanidad de vanidades, dijo el Predicador; vanidad de vanidades, todo es vanidad.
Alégrate, joven, en tu juventud, y tome placer tu corazón en los días de tu juventud; y anda en los caminos de tu corazón, y en la vista de tus ojos; pero sabe, que sobre todas estas cosas te traerá Dios a juicio.
Al fin miré yo todas las obras que habían hecho mis manos, y el trabajo que tomé para hacerlas; y he aquí, todo vanidad y aflicción de espíritu, y sin provecho debajo del sol.
He visto asimismo que todo trabajo y toda rectitud de obras mueve la envidia del hombre contra su prójimo. También esto es vanidad y aflicción de espíritu.
He aquí pues el bien que yo he visto: Que lo bueno es comer y beber, y gozar uno del bien de todo su trabajo con que se fatiga debajo del sol, todos los días de su vida que Dios le ha dado; porque esta es su parte.
El del hombre a quien Dios dio riquezas, y hacienda, y honra, y nada le falta de todo lo que su alma desea; mas Dios no le dio facultad de comer de ello, sino que los extraños se lo comen. Esto vanidad es, y enfermedad maligna.
Porque desde muy atrás he quebrado tu yugo, y roto tus ataduras; y dijiste: No serviré (al pecado ). Con todo eso, sobre todo collado alto y debajo de todo árbol umbroso, corrías tú, oh ramera.