Y se sentaron a comer pan; y alzando los ojos miraron, y he aquí una compañía de ismaelitas que venía de Galaad, y sus camellos traían aromas y bálsamo y mirra, e iban a llevarlo a Egipto.
Cantares 5:1 - Biblia Spanish Sagradas Escrituras Yo vine a mi huerto, oh hermana, esposa mía; he cogido mi mirra y mis aromas; he comido mi panal y mi miel, mi vino y mi leche he bebido. Comed, amigos; bebed, amados, y embriagaos. Dugang nga mga bersyonBiblia Reina Valera 1960 Yo vine a mi huerto, oh hermana, esposa mía; He recogido mi mirra y mis aromas; He comido mi panal y mi miel, Mi vino y mi leche he bebido. Comed, amigos; bebed en abundancia, oh amados. Biblia Nueva Traducción Viviente ¡He entrado en mi jardín, tesoro mío, esposa mía! Recojo mirra entre mis especias, y disfruto del panal con mi miel y bebo vino con mi leche. Oh amante y amada: ¡coman y beban! ¡Sí, beban su amor hasta saciarse! Biblia Católica (Latinoamericana) He entrado en mi huerto,
hermana mía, novia mía,
he tomado mi mirra con mi perfume,
he comido mi miel en su panal,
he bebido mi vino y mi leche.
Amigos, coman,
beban, compañeros, embriáguense. La Biblia Textual 3a Edicion Él ¡He venido a mi huerto, oh hermana mía y esposa mía; He recogido mi mirra con mi bálsamo, He comido mi panal con mi miel; He bebido mi vino con mi leche! ¡Comed, amigos! ¡Bebed y embriagaos, oh amados! Biblia Serafín de Ausejo 1975 Yo vengo a mi jardín, hermana, esposa mía, a coger de mi mirra y de mi bálsamo, a comer de mi panal y de mi miel, a beber de mi vino y de mi leche. Comed, amigos, y bebed, y embriagaos de amores. Biblia Reina Valera Gómez (2023) He venido a mi huerto, oh hermana mía, esposa mía; he recogido mi mirra y mis aromas; he comido mi panal y mi miel, mi vino y mi leche he bebido. Comed, amigos; bebed en abundancia, oh amados. |
Y se sentaron a comer pan; y alzando los ojos miraron, y he aquí una compañía de ismaelitas que venía de Galaad, y sus camellos traían aromas y bálsamo y mirra, e iban a llevarlo a Egipto.
El SEÑOR ama a los que le temen; a los que esperan en su misericordia.
A los santos que están en la tierra, y a los íntegros; toda mi afición en ellos.
Come, hijo mío, de la miel, porque es buena, y del panal dulce a tu paladar;
me hice huertos y jardines, y planté en ellos árboles de todos frutos.
Mi amado es para mí un manojito de mirra, que reposa entre mis pechos.
Levántate, aquilón, y ven, Austro; sopla mi huerto, despréndanse sus aromas. venga mi amado a su huerto, y coma de su dulce fruta.
Conmigo del Líbano, oh esposa, conmigo vendrás del Líbano; mirarás desde la cumbre de Amana, desde la cumbre de Senir y de Hermón; desde las guaridas de los leones, desde los montes de los tigres.
Al huerto de los nogales descendí a ver los frutos del valle, y para ver si florecían las vides, si florecían los granados.
Mi amado descendió a su huerto, a las eras de las especias, para apacentar en los huertos, y para coger los lirios.
¡Oh quién te me diese como hermano que mamó los pechos de mi madre; de modo que te halle yo fuera, y te bese, y no me menosprecien!
Oh tú la que moras en los huertos, los compañeros escuchan tu voz; házmela oír.
Mas su negociación, y su ganancia será consagrada al SEÑOR; no se guardará ni se atesorará, porque su negociación será para los que estuvieren delante del SEÑOR, para que coman hasta saciarse, y vistan honradamente.
Ahora cantaré por mi amado el cantar de mi amado a su viña. Tenía mi amado una viña en un recuesto, lugar fértil.
Ciertamente consolará el SEÑOR a Sion, consolará todas sus soledades, y tornará su desierto como paraíso, y su soledad como huerto del SEÑOR; se hallará en ella alegría y gozo, confesión y voz de cantar.
Del trabajo de su alma verá y será saciado. Y con su conocimiento justificará mi Siervo justo a muchos; y él llevará las iniquidades de ellos.
y el SEÑOR te pastoreará siempre, y en las sequías saciará tu alma, y engordará tus huesos; y serás como huerta de riego, y como manadero de aguas, cuyas aguas nunca faltan.
Porque como la tierra produce su renuevo, y como el huerto hace brotar su simiente, así el Señor DIOS hará brotar justicia y alabanza delante de todos los gentiles.
Por tanto, así dijo el Señor DIOS: He aquí que mis siervos comerán, y vosotros tendréis hambre. He aquí que mis siervos beberán, y vosotros tendréis sed; he aquí, que mis siervos se alegrarán, y vosotros seréis avergonzados;
Y veréis, y se alegrará vuestro corazón; y vuestros huesos reverdecerán como la hierba; y la mano del SEÑOR para con sus siervos será conocida, y se airará contra sus enemigos.
Y respondiendo el Rey, les dirá: De cierto os digo que en cuanto lo hicisteis a uno de estos mis hermanos pequeñitos, a mí lo hicisteis.
Mas os digo, amigos míos: No temáis de los que matan el cuerpo, y después no tienen más que hacer.
El que tiene la esposa, es el esposo; mas el amigo del esposo, que está en pie y le oye, se goza grandemente de la voz del esposo; así pues, este mi gozo es cumplido.
Entonces los discípulos, cada uno conforme a lo que tenía, determinaron enviar subsidio a los hermanos que habitaban en Judea;
Y no os embriaguéis de vino, en lo cual hay disolución; mas sed llenos de Espíritu;
Y el Espíritu y la Esposa dicen: Ven. Y el que oye, diga: Ven. Y el que tiene sed, venga; y el que quiere, tome del agua de la vida gratuitamente.
Y cuando ellos le vieron, tomaron treinta compañeros que estuviesen con él;
Y la mujer de Sansón fue dada a su compañero, con el cual él antes se acompañaba.