Dios mío, clamo de día, y no oyes; y de noche, y no puedo estar en silencio.
Cantares 3:1 - Biblia Spanish Sagradas Escrituras Por las noches busqué en mi cama al que ama mi alma; lo busqué, y no lo hallé. Dugang nga mga bersyonBiblia Reina Valera 1960 Por las noches busqué en mi lecho al que ama mi alma; Lo busqué, y no lo hallé. Biblia Nueva Traducción Viviente Una noche, mientras estaba en mi cama, suspiré por mi amado; suspiraba por él, pero él no venía. Biblia Católica (Latinoamericana) Sobre mi lecho, por las noches,
yo buscaba al amado de mi alma.
Lo busqué y no lo hallé. La Biblia Textual 3a Edicion Por las noches en mi lecho, Buscaba al que ama mi alma. Lo busqué, pero no lo hallé. Biblia Serafín de Ausejo 1975 En mi lecho, en la noche, buscaba yo al amado de mi alma: lo buscaba y no lo hallé. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Por las noches busqué en mi lecho al que ama mi alma: Lo busqué, y no lo hallé. |
Dios mío, clamo de día, y no oyes; y de noche, y no puedo estar en silencio.
Temblad, y no pequéis. Meditad en vuestro corazón sobre vuestra cama, y desistid. (Selah.)
Heme consumido a fuerza de gemir; todas las noches inundo mi lecho, riego mi estrado con mis lágrimas.
Hazme saber, o tú a quien ama mi alma, dónde apacientas, dónde sesteas tu rebaño al medio día; pues, ¿por qué había yo de estar como vagueando tras los rebaños de tus compañeros?
Abrí yo a mi amado; mas mi amado se había ido, había ya pasado; y tras su hablar salió mi alma: lo busqué, y no lo hallé; lo llamé, y no me respondió.
Yo os conjuro, oh doncellas de Jerusalén, si hallareis a mi amado, que le hagáis saber cómo de amor estoy enferma.
Con mi alma te deseo en la noche, y entre tanto que me dure el espíritu en medio de mí, madrugaré a buscarte; porque desde que hay juicios tuyos en la tierra, los moradores del mundo aprenden justicia.
Buscad al SEÑOR, mientras se halla; llamadle en tanto que está cercano.
Esforzaos a entrar por la puerta angosta; porque os digo que muchos procurarán entrar, y no podrán.
Le dice la tercera vez: Simón, hijo de Jonás, ¿me amas? Se entristeció Pedro de que le dijese la tercera vez: ¿Me amas? Y le dice: Señor, tú sabes todas las cosas; tú sabes que te amo. Le dice Jesús: Apacienta mis ovejas.
al cual, no habiendo visto, le amáis; en el cual creyendo, aunque al presente no lo veáis, os alegráis con gozo inefable y glorificado;