Y dijo Abner a Joab: Levántense ahora los jóvenes, y maniobren delante de nosotros. Y Joab respondió: Levántense.
2 Samuel 2:27 - Biblia Spanish Sagradas Escrituras Y Joab respondió: Vive Dios que si no hubieras hablado, ya desde esta mañana el pueblo hubiera dejado de seguir a sus hermanos. Dugang nga mga bersyonBiblia Reina Valera 1960 Y Joab respondió: Vive Dios, que si no hubieses hablado, el pueblo hubiera dejado de seguir a sus hermanos desde esta mañana. Biblia Nueva Traducción Viviente Entonces dijo Joab: —Si no hubieras hablado, solo Dios sabe lo que habría pasado, porque los habríamos perseguido toda la noche de ser necesario. Biblia Católica (Latinoamericana) Joab respondió: 'Tan cierto como que Yavé vive que si tú no hubieras hablado, esta gente habría seguido persiguiendo a sus hermanos hasta la madrugada'. La Biblia Textual 3a Edicion Y dijo Joab: Vive Ha-’Elohim que si no hubieras hablado, ciertamente el pueblo no habría dejado de perseguir a su prójimo hasta la mañana. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Respondió Joab: 'Vive Dios que, si no hubieras hablado, el ejército no habría cesado de perseguir a sus hermanos hasta mañana'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y Joab respondió: Vive Dios que si no hubieras hablado, ya desde esta mañana el pueblo hubiera dejado de seguir a sus hermanos. |
Y dijo Abner a Joab: Levántense ahora los jóvenes, y maniobren delante de nosotros. Y Joab respondió: Levántense.
Y Abner dio voces a Joab, diciendo: ¿Consumirá el cuchillo perpetuamente? ¿No sabes tú que al cabo sigue amargura? ¿Hasta cuándo no has de decir al pueblo que se vuelvan de seguir a sus hermanos?
Entonces Joab tocó el cuerno, y todo el pueblo se detuvo, y no siguió más a los de Israel, ni peleó más.
Vive el Dios que me quitó mi derecho, y el Omnipotente, que amargó mi alma,
La respuesta suave quita la ira; mas la palabra áspera hace subir el furor.
Soltar las aguas (hablar precipitadamente ) es el principio de la contienda; pues, antes que se revuelva el pleito, déjalo.
Los pensamientos con el consejo se ordenan; y con sabios consejos se hace la guerra.
No salgas a pleito presto, no sea que no sepas qué hacer al fin, después que tu prójimo te haya avergonzado.
Y dijiste: Para siempre seré señora. Hasta ahora no has pensado en esto, ni te acordaste de tu postrimería.
Ahora pues, señor mío, vive el SEÑOR y vive tu alma, que el SEÑOR te ha vedado que vinieses a derramar sangre, y vengarte por tu propia mano. Sean, pues, como Nabal tus enemigos, y todos los que procuran mal contra mi señor.