Y oyó Dios la voz del muchacho; y el ángel de Dios llamó a Agar desde el cielo, y le dijo: ¿Qué tienes, Agar? No temas; porque Dios ha oído la voz del muchacho en donde está.
2 Reyes 13:4 - Biblia Spanish Sagradas Escrituras Mas Joacaz oró a la faz del SEÑOR, y el SEÑOR lo oyó; porque miró la aflicción de Israel, pues el rey de Siria los afligía. Dugang nga mga bersyonBiblia Reina Valera 1960 Mas Joacaz oró en presencia de Jehová, y Jehová lo oyó; porque miró la aflicción de Israel, pues el rey de Siria los afligía. Biblia Nueva Traducción Viviente Entonces Joacaz pidió en oración la ayuda del Señor, y el Señor oyó su oración, pues veía la cruel opresión que el rey de Aram ejercía sobre Israel. Biblia Católica (Latinoamericana) YoAjaz suplicó a Yavé y éste lo escuchó porque había visto hasta qué punto el rey de Aram oprimía a los israelitas. La Biblia Textual 3a Edicion Pero Joacaz procuró aplacar el rostro° de YHVH, y YHVH lo escuchó, porque Él veía la opresión de Israel, cómo los oprimía el rey de Siria. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Pero Joacaz imploró a Yahveh, y Yahveh lo escuchó, porque había visto la opresión a que sometía a los israelitas el rey de Aram. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Mas Joacaz oró a la faz de Jehová, y Jehová lo oyó: porque miró la aflicción de Israel, pues el rey de Siria los afligía. |
Y oyó Dios la voz del muchacho; y el ángel de Dios llamó a Agar desde el cielo, y le dijo: ¿Qué tienes, Agar? No temas; porque Dios ha oído la voz del muchacho en donde está.
Si el Dios de mi padre, el Dios de Abraham, y el temor de Isaac, no fuera conmigo, de cierto me enviarías ahora vacío; vio Dios mi aflicción y el trabajo de mis manos, y te reprendió anoche.
Así que Hazael, rey de Siria, afligió a Israel todo el tiempo de Joacaz.
Mas el SEÑOR tuvo misericordia de ellos, y se compadeció de ellos, y los miró, por amor de su pacto con Abraham, Isaac y Jacob; y no quiso destruirlos ni echarlos de delante de sí hasta ahora.
Por cuanto el SEÑOR miró la muy amarga aflicción de Israel; que no había nadie guardado ni quedado, ni quien diese ayuda a Israel;
Su oración también, y cómo fue oído, todos sus pecados, y su prevaricación, los lugares donde edificó altos y había puesto bosques e ídolos antes que se humillase, he aquí estas cosas están escritas en las palabras de los videntes.
Ayunamos pues, y buscamos a nuestro Dios sobre esto, y él nos fue propicio.
Si los mataba, entonces le buscaban; y se convertían, y buscaban a Dios de mañana.
Y dijo el SEÑOR: Bien he visto la aflicción de mi pueblo que está en Egipto, y he oído su clamor a causa de sus exactores; por lo cual yo he entendido sus dolores.
El clamor, pues, de los hijos de Israel ha venido ahora delante de mí, y también he visto la opresión con que los egipcios los oprimen.
SEÑOR, en la tribulación te buscaron, derramaron oración cuando los castigaste.
En toda angustia de ellos él fue angustiado, y el Angel de su faz los salvó. Con su amor y con su clemencia los redimió, y los trajo a cuestas , y los levantó todos los días del siglo.
que dicen al leño: Mi padre eres tú; y a la piedra: Tú me has engendrado; pues me volvieron la cerviz, y no el rostro; y en el tiempo de su trabajo dicen: Levántate, y líbranos.
Clama a mí, y te responderé, y te enseñaré cosas grandes y dificultosas que tú no sabes.
Entonces el pueblo vino a Moisés, y dijeron: Hemos pecado por haber hablado contra el SEÑOR, y contra ti; ora al SEÑOR que quite de nosotros estas serpientes. Y Moisés oró por el pueblo.
Y los hijos de Israel clamaron al SEÑOR, diciendo: Nosotros hemos pecado contra ti; porque hemos dejado a nuestro Dios, y servido a los baales.