Entonces les declaré cómo la mano de mi Dios era buena sobre mí, y asimismo las palabras del rey, que me había dicho. Y dijeron: Levantémonos, y edifiquemos. Y confortaron sus manos para bien.
1 Samuel 23:16 - Biblia Spanish Sagradas Escrituras Entonces se levantó Jonatán hijo de Saúl, y vino a David en el bosque, y confortó su mano en Dios. Dugang nga mga bersyonBiblia Reina Valera 1960 Entonces se levantó Jonatán hijo de Saúl y vino a David a Hores, y fortaleció su mano en Dios. Biblia Nueva Traducción Viviente Jonatán fue a buscar a David y lo animó a que permaneciera firme en su fe en Dios. Biblia Católica (Latinoamericana) Fue entonces cuando Jonatán, hijo de Saúl, fue a Jorsa a visitar a David, para darle ánimo de parte de Dios. La Biblia Textual 3a Edicion Y se levantó Jonatán ben Saúl, y fue adonde estaba David en Hores, y lo reconfortó en ’Elohim, Biblia Serafín de Ausejo 1975 Fue entonces cuando Jonatán, hijo de Saúl, se puso en camino para ir en busca de David, en Jorsá, y confortarlo de parte de Dios. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Entonces se levantó Jonatán, hijo de Saúl, y vino a David en el bosque, y fortaleció su mano en Dios. |
Entonces les declaré cómo la mano de mi Dios era buena sobre mí, y asimismo las palabras del rey, que me había dicho. Y dijeron: Levantémonos, y edifiquemos. Y confortaron sus manos para bien.
Pero yo os alentaría con mis palabras, y la consolación de mis labios detendría el dolor .
El ungüento y el incienso alegran el corazón; así la dulzura del amigo con el consejo del alma.
Por cuanto entristecisteis con mentira el corazón del justo, al cual yo no entristecí, y fortalecisteis las manos del impío, para que no se apartase de su mal camino, infundiéndole ánimo;
mas yo he rogado por ti que tu fe no falte; y tú, una vez convertido, confirma a tus hermanos.
Por lo demás, hermanos míos, confortaos en el Señor, y en la potencia de su fortaleza.
Y manda a Josué, y anímalo, y confórtalo; porque él ha de pasar delante de este pueblo, y él les hará heredar la tierra que verás.
Viendo, pues , David que Saúl había salido en busca de su alma, se estaba él en el bosque en el desierto de Zif.
Y David fue muy angustiado, porque el pueblo hablaba de apedrearlo; porque todo el pueblo estaba con ánimo amargo, cada uno por sus hijos y por sus hijas; mas David se esforzó en el SEÑOR su Dios.