Online nga Bibliya

Mga paanunsiyo


Ang tibuok bibliya Daang Tugon Bag-ong Tugon




1 Corintios 11:30 - Biblia Spanish Sagradas Escrituras

Por lo cual hay muchos enfermos y debilitados entre vosotros; y muchos duermen.

Tan-awa ang kapitulo
Ipakita Interlinear Bible

Dugang nga mga bersyon

Biblia Reina Valera 1960

Por lo cual hay muchos enfermos y debilitados entre vosotros, y muchos duermen.

Tan-awa ang kapitulo

Biblia Nueva Traducción Viviente

Esa es la razón por la que muchos de ustedes son débiles y están enfermos y algunos incluso han muerto.

Tan-awa ang kapitulo

Biblia Católica (Latinoamericana)

Y por esta razón varios de ustedes están enfermos y débiles y algunos han muerto.

Tan-awa ang kapitulo

La Biblia Textual 3a Edicion

Por esto hay muchos débiles y enfermos entre vosotros, y bastantes duermen.°

Tan-awa ang kapitulo

Biblia Serafín de Ausejo 1975

Por eso hay entre vosotros gran número de enfermos y achacosos, y no pocas muertes.

Tan-awa ang kapitulo

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

Por lo cual hay muchos debilitados y enfermos entre vosotros; y muchos duermen.

Tan-awa ang kapitulo
Ubang mga hubad



1 Corintios 11:30
19 Cross References  

y dijo: Si oyeres atentamente la voz del SEÑOR tu Dios, e hicieres lo recto delante de sus ojos, y dieres oído a sus mandamientos, y guardares todos sus estatutos, ninguna enfermedad, de las que envié a los egipcios, te enviaré a ti; porque yo soy el SEÑOR tu Sanador.


A vosotros solamente he conocido de todas las familias de la tierra; por tanto, visitaré contra vosotros todas vuestras maldades.


Y el SEÑOR dijo a Moisés y a Aarón: Por cuanto no creísteis en mí, para santificarme en ojos de los hijos de Israel, por tanto, no meteréis esta congregación en la tierra que les he dado.


Aarón será reunido a sus pueblos; pues no entrará en la tierra que yo di a los hijos de Israel, por cuanto fuisteis rebeldes a mi mandamiento en las aguas de Meriba.


Porque a la verdad David, habiendo servido en su generación a la voluntad de Dios, durmió, y fue juntado con sus padres, y vio corrupción.


Y puesto de rodillas, clamó a gran voz: Señor, no les imputes este pecado. Y habiendo dicho esto, durmió en el Señor.


Porque el que come y bebe indignamente, juicio come y bebe para sí, no discerniendo el cuerpo del Señor.


Pero si nos examinásemos a nosotros mismos, cierto no seríamos juzgados.


Mas siendo juzgados, somos castigados del Señor, para que no seamos condenados con el mundo.


He aquí, os digo un misterio: Todos ciertamente resucitaremos, mas no todos seremos transformados.


Porque si creemos que Jesús murió y resucitó, así también traerá Dios con él a los que durmieron en Jesús.


Yo reprendo y castigo a todos los que amo: sé pues celoso, y enmiéndate.