Números 16:9 - Versión Biblia Libre9 ¿Les parece poco que el Dios de Israel los haya elegido entre todos los demás israelitas y les haya permitido acercarse a él y realizar la obra en el Tabernáculo del Señor, estar ante los israelitas y servirles? Ver CapítuloMás versionesBiblia Reina Valera 19609 ¿Os es poco que el Dios de Israel os haya apartado de la congregación de Israel, acercándoos a él para que ministréis en el servicio del tabernáculo de Jehová, y estéis delante de la congregación para ministrarles, Ver CapítuloBiblia Nueva Traducción Viviente9 ¿Les parece de poca importancia que el Dios de Israel los escogiera de entre toda la comunidad israelita para estar cerca de él de manera que sirvan en el tabernáculo del Señor y que estén delante de los israelitas para ministrarles? Ver CapítuloBiblia Católica (Latinoamericana)9 ¿Les parece poco que el Dios de Israel los haya separado de la comunidad de los israelitas, y que los haya hecho acercarse a El para que sirvan en la Morada de Yavé y así aseguren el culto en nombre de la comunidad? Ver CapítuloLa Biblia Textual 3a Edicion9 ¿Es poco para vosotros que el Dios de Israel os haya separado de la asamblea de Israel para aproximaros a Él para servir en la obra del Tabernáculo de YHVH, y manteneros al frente de la asamblea para ministrarles? Ver CapítuloBiblia Serafín de Ausejo 19759 ¿os parece poco que el Dios de Israel os haya separado de la comunidad de los israelitas para poneros junto a él, para que le prestéis servicio en el santuario de Yahveh y para que estéis al frente de la comunidad a fin de atender al culto en su nombre? Ver Capítulo |
Josías dijo a los levitas que enseñaban a todo Israel y eran santos para el Señor: “Colocad el Arca sagrada en el Templo construido por Salomón, hijo de David, rey de Israel. Ya no es necesario que la lleven sobre sus hombros. Tu responsabilidad ahora es servir al Señor, tu Dios, y a su pueblo Israel.
Ese mismo día se pusieron hombres a cargo de los almacenes que contenían las ofrendas, la primera parte de las cosechas y los diezmos. Lo que la Ley asignaba a los sacerdotes y a los levitas se llevaba a estos almacenes desde los campos de los alrededores de las ciudades, porque todo el pueblo de Judá se alegraba por el servicio de los sacerdotes y de los levitas.