Biblia Todo Logo
La Biblia Online

- Anuncios -





Mateo 8:9 - Versión Biblia Libre

9 Porque yo mismo estoy bajo la autoridad de mis superiores, y a la vez yo también tengo soldados bajo mi mando. Yo le ordeno a uno: ‘¡Ve!’ y él va. Mando a otro: ‘¡Ven!’ y él viene. Digo a mi siervo: ‘¡Haz esto!’ y él lo hace”.

Ver Capítulo Copiar


Más versiones

Biblia Reina Valera 1960

9 Porque también yo soy hombre bajo autoridad, y tengo bajo mis órdenes soldados; y digo a este: Ve, y va; y al otro: Ven, y viene; y a mi siervo: Haz esto, y lo hace.

Ver Capítulo Copiar

Biblia Nueva Traducción Viviente

9 Lo sé porque estoy bajo la autoridad de mis oficiales superiores y tengo autoridad sobre mis soldados. Solo tengo que decir: “Vayan”, y ellos van, o: “Vengan”, y ellos vienen. Y si les digo a mis esclavos: “Hagan esto”, lo hacen.

Ver Capítulo Copiar

Biblia Católica (Latinoamericana)

9 Pues yo, que no soy más que un capitán, tengo soldados a mis órdenes, y cuando le digo a uno: Vete, él se va; y si le digo a otro: Ven, él viene; y si ordeno a mi sirviente: Haz tal cosa, él la hace.

Ver Capítulo Copiar

La Biblia Textual 3a Edicion

9 porque aun yo, siendo hombre bajo autoridad, tengo soldados sujetos a mí, y digo a éste: Ve, y va; y a otro: Ven, y viene; y a mi siervo: Haz esto, y lo hace.

Ver Capítulo Copiar

Biblia Serafín de Ausejo 1975

9 Porque también yo, aunque no soy más que un subalterno, tengo soldados bajo mis órdenes, y le digo a uno: 'Ve', y va; y a otro: 'Ven', y viene; y a mi criado: 'Haz esto', y lo hace'.

Ver Capítulo Copiar




Mateo 8:9
17 Referencias Cruzadas  

Tus juicios siguen vigentes —aun hasta hoy—porque todo sirve a tu voluntad.


Que le alaben los relámpagos, el granizo, la nieve, las nubes, y los vientos tormentosos, así como todos los que obedecen su voz de mando.


Cuando Jesús escuchó lo que este hombre dijo, se quedó asombrado. Entonces le dijo a los que le seguían: “En verdad les digo que no he encontrado este tipo de confianza en ninguna parte de Israel.


El centurión respondió: “Señor, no merezco una visita a mi casa. Solo di la palabra y mi siervo quedará sano.


Todos estaban asombrados ante lo que había ocurrido. “¿Qué es esto?” se preguntaban unos a otros. “¿Qué enseñanza nueva es esta, que tiene tanta autoridad? ¡Incluso los espíritus malos hacen lo que él les ordena!”


Entonces Jesús fue y se puso en pie junto a ella. Le ordenó a la fiebre que se fuera, y así sucedió. Entonces ella se levantó de inmediato y preparó una comida para ellos.


Porque yo mismo estoy bajo autoridad de mis superiores, y tengo soldados bajo mi autoridad también. Yo ordeno a uno que vaya, y él va, a otro le ordeno que venga, y él viene. Yo ordeno a mi siervo que haga algo, y él lo hace”.


Jesús reunió a sus doce discípulos. Y les dio poder y autoridad sobre todos los demonios, y el poder para sanar enfermedades.


Los que son siervos, obedezcan a sus amos, no tratando de agradarlos falsamente, sino con sinceridad y honestidad, respetando al Señor.


Enseña a los siervos a que siempre obedezcan a sus amos. Enséñales que siempre deben procurar agradarles y no hablar mal a sus espaldas.


Síguenos en:

Anuncios


Anuncios


¡Síguenos en WhatsApp! Síguenos